Pekín acusó a los políticos estadounidenses de “decir mentiras descaradas” sobre la pandemia del nuevo coronavirus, después de que el presidente Donald Trump sugiriera la víspera que podría pedir una compensación económica a China por los daños causados.
“Los responsables estadounidenses han ignorado la verdad en varias ocasiones y han proferido mentiras descaradas”, dijo un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Geng Shuang, a la pregunta sobre las declaraciones de Trump.
“Solo tienen un objetivo: eximirse de cualquier responsabilidad sobre su propia gestión de la epidemia y distraer la atención pública”, agregó.
El mandatario estadounidense apuntó en su rueda de prensa diaria la posibilidad de pedir a Pekín una compensación de miles de millones de dólares por los daños causados por el nuevo coronavirus, que irrumpió en la ciudad china de Wuhan a finales del 2019.
“No estamos contentos con China”, dijo Trump desde la Casa Blanca. “Podría haberse detenido con rapidez y no se habría propagado por todo el mundo”, aseguró, sugiriendo la idea de reclamar una suma multimillonaria.
La epidemia ha superado los tres millones de contagios en el mundo y ha causado más de 200,000 muertos.
Con un tercio de los casos y más de 56,000 decesos, Estados Unidos es, de lejos, el país más afectado del mundo.