A tres días de que los colombianos acudan a las urnas para las elecciones presidenciales, el ambiente en el mercado de bonos es de intranquilidad. El ascenso de Gustavo Petro, un exguerrillero que se transformó en político de izquierda, está desconcertando a operadores que temen que el modelo económico que la nación ha practicado durante décadas –una combinación de disciplina fiscal y una fuerte dosis de libre mercado– pueda ser desarticulado.
Los bonos externos del Gobierno se encuentran entre los de una región que se ha visto duramente afectada por el desplome mundial en los mercados de deuda este año, y los rendimientos de sus pagarés locales se han disparado a sus niveles más altos en más de una década. Los swaps de default crediticio aumentaron y ahora superan a los de Brasil, que tienen una calificación de mayor grado especulativo.
Se están acumulando fuerzas que podrían mitigar, o incluso revertir, estas pérdidas. La economía está en auge, al igual que la demanda internacional de las exportaciones de productos básicos del país. Además, Petro podría sufrir una sorpresiva derrota o, de ser elegido, inclinarse por un rumbo más centrista de lo que ha indicado su discurso, como ha sido el caso de los líderes izquierdistas elegidos recientemente en Perú y Chile.
Analistas de algunas firmas señalan que, como resultado, ahora es el momento de comenzar a comprar bonos colombianos a bajo precio, pero, hasta ahora, pocos inversionistas han estado dispuestos a apostar fuerte por un repunte. Como ellos lo ven, es demasiado arriesgado, dado todo lo que podría salir mal. Petro ya ha asustado a los mercados con sus planes de detener la exploración de petróleo –la mayor exportación del país– y gravar las grandes propiedades de tierras.
El candidato que va en segundo lugar de esta carrera es Federico “Fico” Gutiérrez, exalcalde de Medellín que ha prometido reducir el déficit y recuperar la calificación de grado de inversión del país. El empresario Rodolfo Hernández, que ha visto un reciente aumento en su apoyo, también podría disputar la probable segunda vuelta el 19 de junio.
“Prevalece la incertidumbre”, dijo Gabriel Szpigiel, que supervisa US$ 5,000 millones en bonos de mercados emergentes en Marathon Asset Management. “La incógnita de la política determinará si Colombia se convierte en una inversión más atractiva o más riesgosa”.
Estas son algunas de las opiniones bajistas y alcistas más destacadas en torno a los bonos antes de las elecciones del domingo. La reacción del mercado al resultado solo se verá el martes, ya que el lunes es feriado en Estados Unidos y Colombia y los mercados locales estarán cerrados.
Alejandro Arreaza, economista de Barclays cuyas opiniones contrarias en El Salvador y Ecuador han acertado durante el último año:
- Los riesgos de la votación del domingo están sesgados al alza. El alto crecimiento, los crecientes precios del petróleo y un Congreso moderado mantendrán al país en un camino financiero estable, independientemente de quién gane, señaló
- “Mantenemos una visión constructiva”, dijo Arreaza, cuya firma tiene una recomendación de sobreponderación para los pagarés en dólares del país. “En caso de que gane Petro, los checks & balances contienen los riesgos de cambios radicales en el marco de política, y si ganan Gutiérrez o Hernández, eso puede ayudar a disipar algunas de las preocupaciones del mercado”
Kathryn Rooney Vera, encargada de investigación macroeconómica global de Bulltick LLC en Miami, quien ha estado recomendando aumentar la exposición a Colombia:
- “Creemos que una victoria presidencial de Petro, si bien no es favorable al mercado, ya está descontada. Si Petro sorprende y pierde, es probable que los activos de Colombia se disparen”
- “Incluso si gana, dado el resultado de las elecciones al Congreso, creemos que su capacidad para concretar la agenda populista se verá mitigada”
- “Hemos estado recomendando tomar posiciones largas en Colombia, ya que hemos visto que los bonos tienen un precio favorable en relación con sus pares de calificación como Brasil”, indicó
Gorky Urquieta, administrador de dinero con sede en Chicago de Neuberger Berman:
- “Es muy tentador usar ese libro de jugadas de Chile y Perú. Pero todavía no se realiza la elección y lo más probable es que haya una segunda vuelta”, dijo
- “En la medida en que Petro tenga una ventaja lo suficientemente cómoda en la primera ronda, es posible que no modere su postura. Colombia es un país bastante conservador. Muchas de las potenciales políticas que ha propuesto conllevan el riesgo de quitarle parte de los votos”
Jared Lou, gerente de cartera de William Blair Investment Management, que ha estado reduciendo su exposición a la deuda de la nación a medida que se acercan las elecciones:
- “Petro aumentaría la incertidumbre y disminuiría la inversión”, sostuvo
- “La pregunta interesante es si ya se ha descontado el peor de los escenarios. La respuesta, sinceramente, es que no lo sabemos”
- “Aunque Petro gane, tendrá que trabajar con el Congreso. No será tan radical como la gente teme que sea”
Andrea Kiguel, Álvaro Mollica y Dirk Willer, analistas de Citigroup escribieron en una nota:
- “Los mercados buscarán señales de que Petro se moderará, si efectivamente gana”, escribieron. “Nuestra expectativa general es que habrá un repunte postelectoral en los activos colombianos”
- Es mejor esperar a que se acerque la segunda ronda antes de realizar transacciones largas con activos de la nación, dijeron
Felipe Camargo, economista sénior de Oxford Economics
- “Si Gustavo Petro intenta imponer su agenda populista, esperamos que una credibilidad fiscal agotada deprecie el peso un 9% frente al dólar estadounidense y un aumento estructural del 1% en las tasas de interés, al mismo tiempo que enfrenta mayores riesgos de menor crecimiento y mayor inflación” El peso cotizaría más cerca de 4,850 por dólar para el 2026 frente a un pronóstico base de 4,450 pesos por dólar