"Los principales riesgos tienen que ser monitoreados en los próximos meses, pero no debemos olvidar que los factores mencionados se presentan en un contexto moderadamente bueno", señala Jean Pierre Fournier.
"Los principales riesgos tienen que ser monitoreados en los próximos meses, pero no debemos olvidar que los factores mencionados se presentan en un contexto moderadamente bueno", señala Jean Pierre Fournier.

El 2025 será un año en el que los inversionistas tendrán que balancear el supuesto triunfo contra la inflación con una serie de temas que pondrán un límite a una mejora de las condiciones financieras. Para empezar, el ascenso de Donald Trump en Estados Unidos ratifica que la conflictividad a escala global continuará siendo una dificultad para hacer negocios. Ya sea por un aumento de tarifas, con impacto directo en los “economics” de las compañías, como las tensas relaciones entre los líderes de algunos países, los empresarios tendrán que evaluar si sus cadenas de producción y distribución pueden ser las mismas para sostener el crecimiento en ventas y utilidades.