FOTOS | Le sucede incluso a los emprendedores más centrados y motivados. Te sientas en tu escritorio y abres tu computadora portátil listo para cambiar el mundo y luego BAM: unas horas más tarde, te encuentras perdido en un mar de pestañas de tu navegador y de paso, se te olvidó comer.
El hiperfoco y la distracción parecen ser cualidades típicas de muchos emprendedores, pero también son rasgos ampliamente reconocido del trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH).
Imagínate, yo llevaba un año tratando de desarrollar mi negocio cuando me diagnosticaron TDAH en adultos. Aunque al principio fue duro entender mi realidad, pronto me di cuenta de que la mayoría de los rasgos del trastorno también me convirtieron en una empresaria exitosa. En lugar de permitir que mi diagnóstico limitara mis habilidades, superé el estigma asociado al TDAH y construí un negocio de miles de dólares en solo dos años.
No soy la única emprendedora con déficit de atención con hiperactividad. Richard Branson, CEO y fundador de Virgin Airlines, se negó a verse limitado por su propio diagnóstico de TDAH y dislexia. La autora y ganadora del Premio Pulitzer Katherine Ellison es una oradora ávida sobre cómo vivir con el trastorno. Y el fundador de JetBlue Airways, David Neeleman, siempre comparte su experiencia sobre emprender con déficit de atención.
Como emprendedores es fácil presionarnos demasiado, y eso incluye ser críticos con nosotros mismos y nuestras limitaciones, ya sea el TDAH u otra condición alterna de aprendizaje. Pero, si Branson pudo iniciar una compañía como Virgin Airlines y prosperar, tú también puedes hacerlo.
Aquí hay cinco rasgos del TDAH que científicamente podrían volverte un mejor emprendedor y que, si los tomas con filosofía, puedes transformar en súper poderes.