La Cámara Nacional de Comercio, Producción, Turismo y Servicios (Perucámaras), expresó su preocupación por la caída de 12.3% de la recaudación tributaria registrada el año pasado y por las proyecciones en torno a un crecimiento de la economía peruana este año de apenas 2.5%, manifestando que esto es producto de la inestabilidad política y jurídica, la falta de reformas, así como por la permanencia de funcionarios que no generan confianza.
En ese marco, el gremio exhortó al gobierno a tomar medidas urgentes a fin de revertir la actual recesión económica y recuperar la generación de empleo formal, la recaudación tributaria, la lucha contra la pobreza e impulsar la inversión privada.
Perucámaras cuestionó que no se haya tomado medidas efectivas frente a la recesión que nos afecta desde el primer semestre del año pasado, salvo lanzar planes aislados con una serie de medidas que no muestran resultados auspiciosos y mucho menos han logrado revertir la contracción del Producto Bruto Interno (PBI).
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En tal sentido, pidió a la presidenta Dina Boluarte evaluar los cambios que considere necesarios en su equipo de gobierno, reemplazándolo por personalidades que además de su idoneidad profesional, experiencia e independencia política, sean capaces de generar confianza, buscar consensos y ejercer el liderazgo que requiere el país.
“Entendemos que haya quienes no estén dispuestos a aceptar cargos públicos sin el pleno compromiso de apoyo por parte de las más altas instancias de gobierno, por lo que le solicitamos a la presidenta Boluarte garantizar ese apoyo e independencia requeridas para enfrentar y tomar las decisiones que hoy día el país demanda. Hacemos un llamado a los profesionales para su apoyo y compromiso, pues la patria los requiere”, expresó.
Precisó que, con los ingresos fiscales en caída libre, es poco lo que se puede hacer para atender las necesidades más urgentes de la población, como enfrentar el crimen organizado, la delincuencia e inseguridad, mejorar los servicios básicos de salud o brindar una educación de calidad.
Agregó que la inversión pública se mantiene débil, pues no se están implementando las grandes reformas que requiere el Estado, como la digitalización de los procesos, la construcción de bases de datos sólidas y la interoperabilidad entre las instituciones públicas, de forma tal que desde cualquier punto del país sea posible acceder con rapidez y en el momento que se requiera a los servicios del Estado, eliminando la tramitología y la burocracia.
“El Poder Ejecutivo no ha dado muestras de llevar a cabo una ejecución de gasto eficiente y rápida como requiere la situación actual”, subrayó el gremio.
Perucámaras criticó, además, que el Congreso, sin tener iniciativa de gasto, haya aprobado normas populistas que atentan contra el equilibrio de las finanzas públicas, frente a lo cual el Ejecutivo se ha mostrado permisivo y en extremo silencioso, sin considerar que se puede perder la fortaleza fiscal que tanto ha costado construir.
“El Poder Ejecutivo no puede ni debe permitir que el Poder Legislativo, en abierto abuso de poder, norme sobre asuntos de gasto afectando al erario público de manera irresponsable”, sostuvo.
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Asimismo, subrayó que no hay economía ni confianza empresarial que resistan la inestabilidad en que se encuentra sumido el Perú desde hace varios años, a lo que se suman los altos índices de inseguridad ciudadana, frente a la cual tampoco parece haber estrategia alguna, lo que representa un grave riesgo pues situaciones tan peligrosas como las ocurridas en Ecuador podrían repetirse en el Perú.
El gremio consideró también que a esta inestabilidad jurídica y la elevada inseguridad ciudadana contribuye la Fiscalía de la Nación -cuyo objetivo debería ser prevenir y perseguir el delito, así como la defensa de la legalidad- al haber sido convertida en un botín cuyo manejo se disputan grupos interesados en controlarla con fines políticos.
A esto se suma que haya habido seis presidentes en siete años, así como medidas que desalientan la inversión privada, como la derogatoria de la Ley de Promoción Agraria, la reforma de la tercerización laboral, el abandono del Consejo Nacional del Trabajo y las modificaciones en las normas de arbitraje, entre otras.
“Como representantes de los empresarios de cada rincón del país, hacemos un llamado a los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial a asumir sus responsabilidades, establecidas claramente en la Constitución Política y, de cara a los 33 millones de peruanos, emprender un cambio de rumbo que permita volver a creer en el futuro del Perú”, sentenció Perucámaras.
