Para hacer un trámite en una notaría se solía tener que formar una cola relativamente larga o esperar sentado por varios minutos hasta ser atendido. Pero el próximo reinicio de las actividades notariales, tras su total paralización durante la cuarentena, va a implicar una realidad muy diferente, en la que los usuarios deberán permanecer en las oficinas por periodos muy breves y solo para los actos estrictamente necesarios, indicó el decano del Colegio de Notarios de Lima (CNL), Mario Romero.
Por ello, los aforos se van a reducir al menos en 50% y se realizará a distancia parte de los trámites de cada uno de los servicios, mientras el sector busca la forma de digitalizar por completo algunos de ellos, con el fin de reducir al mínimo los traslados de personas y evitar posibles contagios de coronavirus.
En esa línea, para acceder a los servicios de las notarías los procesos se iniciarán mediante coordinaciones telefónicas, se habilitará la recepción de documentos por correo electrónico y las videoconferencias, de modo que los usuarios lleguen a las oficinas de las notarías, previa cita, únicamente para los actos culminantes.
Romero señaló que el sector planteará al Gobierno cambiar el reglamento de la Ley de Notariado, de modo que permita realizar de forma exclusivamente digital la mayor cantidad de servicios que resulte posible. Por el momento, se proponen trasladar por completo al plano virtual el protesto de un título valor (letra de cambio, cheque o pagaré) y la entrega de cartas notariales.
Por ejemplo, en el caso del protesto de un título valor, si el pago no se ha cumplido en la fecha prevista y el tenedor del mismo requiere hacer el protesto, la notaría necesita notificar al deudor en su domicilio, para que luego el tenedor pueda recurrir a la vía judicial. Si bien se busca digitalizar este proceso, la notificación no puede realizarse mediante un mensaje dirigido a un correo electrónico común, puesto que el deudor podría argumentar que no lo vio o que ya no utiliza ese correo.
“En la actualidad hay que hacer la notificación física, por lo que se necesitaría un cambio normativo para que, cuando se vaya a aceptar títulos valores, el obligado al pago señale un domicilio electrónico. Tiene las mismas características que un correo electrónico, pero con la diferencia de que permite dar por garantizado que el deudor está recibiendo la comunicación. Y si no se da cumplimiento, el notario hace esta certificación, con lo cual se evitan traslados, tiempo y mayores costos. Esto también tendría que ser difundido”, explicó el decano.
De modo similar, para el caso de las cartas notariales “se podría encontrar la ruta que evite el traslado de personas, al menos durante el estado de emergencia, porque hay herramientas tecnológicas que permitirían adecuar nuestra función", consideró.
Por otro lado, el Colegio también plantea una modificación al Código Civil con el fin de que sea facultativa la presencia de testigos en la firma de un testamento. “Si usted quiere firmar un testamento, tiene que ir al notario con dos testigos, entonces tienen que ir tres personas juntas, y el notario debe escribir el testamento de puño y letra. En el mundo esto ya ha cambiado, no hay la necesidad de que sea escrito de puño y letra por el notario”, agregó.
Bajo estos cambios y propuestas en elaboración, las notarías se preparan para volver a operar, al ser uno de los sectores que conforman la primera fase de la reactivación económica del país. Son casi 700 notarías existentes a nivel nacional, 145 de las cuales están en Lima.
El decano estima que el reinicio de las operaciones se concretará la próxima semana, pero no necesariamente sucedería así en todas las regiones, debido que en algunas los contagios por coronavirus son demasiado numerosos.
“Entre hoy (martes) y mañana se tendría que definir la fecha (de reinicio). No se tiene muy clara la situación de Lambayeque y Loreto, también hay preocupación sobre Piura y La Libertad. Es probable que algunas regiones no reinicien las actividades al mismo tiempo. Es una apreciación personal, no hay nada definido”, explicó.
Además, las empresas de este sector operarían en un horario recortado, posiblemente de cuatro horas diarias. Ello, sumado a la reducción de los aforos, hace previsible que el número de atenciones de estos servicios se reduzca al menos durante la primera etapa de su reactivación. En el 2019, el número de actos notariales realizados en Lima fue de 1.84 millones y en el 2018 de 1.9 millones, según el CNL.
Romero Valdivieso considera que, inicialmente, los servicios más solicitados serán la conformación de nuevas empresas formales, debido a que han surgido muchos pequeños emprendimientos a raíz de la crisis, y la modificación de estatutos de empresas que, empujadas por la pandemia, deseen cambiar el giro del negocio.
Tal como lo anunció el Ministerio de la Producción, llegó a un acuerdo con el CNL para que el costo de la conformación de una empresa sea de S/ 50.
Finalmente, el decano señaló que las notarías se han comprometido a brindar gratuitamente los servicios por trámites derivados del fallecimiento por coronavirus de trabajadores del sector salud, la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas, así como las gestiones de poderes necesarias para que las personas de menores recursos accedan a los bonos del Estado.
TE PUEDE INTERESAR
- Baja costo para crear una empresa a S/ 50
- Produce evalúa que aplicativos de delivery vuelvan a operar desde mayo
- Piden incluir en fase I de reactivación económica a empresas del sector automotor