Con el rápido aumento de casos positivos de coronavirus (Covid-19) en el mundo, el uso de mascarillas N-95 (de uso médico) para prevenir más contagios avanzó de manera paralela, al punto que los países más afectados –Estados Unidos, Italia y España- ahora pugnan por obtener dicho producto en sus territorios.
Solo durante la última semana, el gobierno de Estados Unidos pidió a la empresa 3M –proveedor de este tipo de mascarillas- que dejara de exportar este implemento a Canadá y Latinoamérica, así como otros equipos protectores contra el virus.
Bajo este escenario de fuerte competencia, Perú vino trabajando en la adquisición de mascarillas, de manera que se compró 1.2 millones de mascarillas N-95 a la empresa PMI MEDICA SAC a un costo de S/ 24.6 millones. La compra estuvo a cargo del Centro Nacional de Abastecimiento de Recursos Estratégicos en Salud (Cenares) del Ministerio de Salud (Minsa).
De otro lado, para la población de a pie, el Minsa emitió -el 30 de marzo- una norma de especificación técnica para la confección de mascarillas faciales textiles de uso comunitario (RM Nº 135-2020-MINSA), a fin de definir los requisitos de diseño y confección. De acuerdo con la cartera de salud, el uso de la mascarilla, el cual cubre la boca y la nariz, reducirá la transmisión de enfermedades.
Posteriormente, el Ministerio de la Producción (Produce) emitió una norma que permite a las actividades del rubro textil y confecciones relacionadas con materiales de protección médica operar durante el Estado de Emergencia Nacional (RM N° 125-2020-PRODUCE), siempre y cuando cumpla con la norma técnica del Minsa.
Sin embargo, la norma permite la operación de medianas o grandes empresas textiles, dejando de lado a las micro y pequeñas empresas (mypes), que también pueden confeccionar mascarillas, señala a Gestión.pe la presidenta de la Coordinadora de Empresarios de Gamarra, Susana Saldaña.
Según indicó, las mypes de Gamarra, así como otras mypes textiles del país, tienen la capacidad para abastecer de mascarillas de tela en el país e incluso tiene potencial de exportación, sin embargo, consideró que para lograrlo, se debe ajustar diversas condiciones.
“Todos los países se están peleando porque creen que China es el único país del mundo que puede producir mascarilla, pero de la región de América del Sur, solamente Perú, Brasil y Colombia tenemos una industria textil potente, entonces creo que puede llegar el momento de desarrollar y fabricar lo que se necesita tanto mercado interno y externo también”, sostuvo.
Lo que hace falta
Para el diseño de mascarillas de tela, Saldaña hace referencia a la norma establecida por el Produce pues es la que permite la fabricación de éstas durante la cuarentena.
De este modo, indicó que los requisitos de la norma están orientadas a las medianas y grandes empresas, lo que dificulta el acceso de las mypes. En ese sentido, indica que desde este punto debería empezar el cambio.
Explica que para la producción y confección de mascarillas faciales textiles, ropa hospitalaria y otros materiales textiles de protección médica durante esta cuarentena, uno de los requisitos es que la empresa deba contar con un número de trabajadores superior a 19 trabajadores en planilla.
“Una microempresa no va a tener esa cantidad de trabajadores en planilla, porque una microempresa tiene menos de 10 trabajadores. Entonces la mediana y gran empresa que está ligada al rubro textil sí pueden cumplir con estos requisitos y es probable que ya estén operando. Ahí ninguna empresa de Gamarra ni otra mype podría operar. Eso es una condicionante que impide (la fabricación de mascarillas)”, refirió.
Otro de los requisitos -explica Saldaña- es que la empresa deba tener una antigüedad y experiencia en el mercado no menor de cuatro 4 años, lo cual consideró un periodo muy elevado. Según dijo, se debería contemplar también a las mypes con un mínimo de 2 años de experiencia demostrada en el rubro textil.
“Hay empresas que pueden cambiarse de rubro sólo para ganar una licitación y eso no es justo también”, comentó.
Finalmente, otra de las condiciones para confeccionar mascarillas y otra indumentaria médica durante el estado de emergencia es que la empresa deba vender o abastecer a mercados locales principales y tener condición de empresa exportadora.
“Una mype confeccionista puede tener experiencia confeccionando, no necesariamente (experiencia) para exportar. Lo que están haciendo es limitar a un universo muy pequeño de mypes y eso es lo que no nos parece lo más adecuado. Solo en Gamarra hay más de 30,000 mypes y ni el 10% de ellas exporta”, concluyó.
EL DATO
El presidente de la República, Martín Vizcarra, anunció que desde esta semana se empezará con la distribución gratuita de mascarillas de tela, con el fin de que las personas puedan protegerse del coronavirus cuando salgan de sus casas.
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