Si bien los titulares están dominados por asesinatos y ataques con misiles en Medio Oriente, los inversionistas están comprando un cúmulo de deuda de los mercados emergentes este año con rendimientos cada vez más bajos. La percepción del riesgo se asimila a la del 2019.
Las expectativas de un acuerdo comercial entre Estados Unidos y China, aunque sea parcial, y la búsqueda de rendimiento están impulsando la demanda de préstamos soberanos y corporativos que se anticipan para el año, dijo Ilya Gofshteyn, un estratega de Standard Chartered establecido en Nueva York.
“Los inversionistas están dispuestos a ir más allá de la curva de riesgo ahora que las tensiones comerciales entre EE.UU. y China parecen estar disminuyendo”, dijo Gofshteyn en una entrevista. Sin grandes sorpresas a la baja, “la búsqueda de dinámicas de rendimiento continuará dominando”.
Indonesia, Israel, el gigante cuprífero de Chile Codelco y México encabezaron la carga de emisores en desarrollo mientras EE.UU. y China se preparan para firmar un acuerdo comercial el 15 de enero, impulsando algunas perspectivas de crecimiento global. México pagó significativamente menos para pedir prestado US$ 2,300 millones a principios de esta semana de lo que había previsto originalmente, incluso mientras EE.UU. se preparaba para las represalias iraníes en Medio Oriente.
Gobiernos y empresas de mercados emergentes vendieron US$ 37,400 millones en mercados de deuda global en los primeros ocho días del 2020, un aumento del 123% en el volumen respecto al mismo período del año anterior, según datos de Bloomberg. Las instituciones financieras y los gobiernos representaron casi el 75% de los bonos vendidos del 1 de enero al 8 de enero, según los datos.
En tanto, la analista de Goldman Sachs en Londres Sara Grut dijo el mes pasado que esperaba que la emisión de bonos soberanos en dólares se eleve en el 2020, en medio de un entorno positivo de renta fija global, que coincide con las expectativas del Fondo Monetario Internacional. Arabia Saudita, Turquía, Emiratos Árabes Unidos, Indonesia y México podrían ser los mayores emisores soberanos de deuda en el 2020, escribió.
“Los participantes del mercado están dispuestos a asumir más riesgos a cambio de una menor rentabilidad en un contexto de reducción del rendimiento a nivel mundial”, dijo Gofshteyn de Standard Chartered. “Los instrumentos con rendimientos relativamente más altos se beneficiarán incluso ante riesgos potenciales”.