Las mujeres representan alrededor de una cuarta parte de los altos ejecutivos de las empresas en el S&P 500 y solo controlan alrededor del 1% del valor de las acciones en manos de líderes corporativos, según muestra una nueva investigación.
La disparidad significa que los ejecutivos masculinos tenían acciones por un valor aproximado de US$ 770,000 millones en compañías del S&P 500 en el 2020, en comparación con alrededor de US$ 9,000 millones en manos de ejecutivas, dijo Andreas Hoepner, profesor de riesgo operativo, banca y finanzas en Smurfit Graduate School of Business de la Universidad de Dublín.
El estudio, realizado con la empresa sueca de datos de género ExecuShe, descubrió que la proporción estaba sesgada incluso después de eliminar a los fundadores de las compañías y a los casos atípicos como el director ejecutivo de Tesla Inc., Elon Musk, el ejecutivo más rico del índice, dijo.
“Encontramos una brecha de poder de género gigante”, dijo Hoepner en una entrevista.
El surgimiento del movimiento #MeToo ha resultado en un mayor escrutinio y un aumento en las promesas corporativas para mitigar los desequilibrios salariales de género y otras desigualdades en los rangos ejecutivos.
Sigue siendo un trabajo en progreso. Las mujeres en Estados Unidos normalmente ganan alrededor 83 centavos por cada dólar que gana un hombre (y eso es solo el salario base).
A medida que más mujeres son ascendidas a puestos de alta dirección, una mayor parte de su compensación general proviene de acciones u opciones sobre acciones, y crece la disparidad con sus pares masculinos.
En el 2020, las mujeres en los rangos superiores del liderazgo del S&P 500 ganaron solo el 75% de lo que ganaron los ejecutivos masculinos, la brecha más amplia en nueve años, principalmente debido al desequilibrio en la propiedad de acciones, según analistas de Morningstar Inc. Las diferencias son aún mayores para las mujeres de color.
Otra razón por la que las mujeres ganan menos es que tienden a tener roles ejecutivos en departamentos como recursos humanos y marketing, donde los niveles de propiedad accionaria tienden a ser más bajos que para puestos como director de tecnología, dijo Hoepner. La realidad es que también hay muchas menos mujeres directoras ejecutivas, señaló.
El estudio se basó en presentaciones regulatorias y páginas web de empresas, y la investigación muestra cómo las disparidades de equidad han crecido exponencialmente con el tiempo, afirmo Hoepner.