Al igual que otros mercados de cultivos, el algodón está en el limbo. Tras recuperarse de mínimos de tres años en las señales de cosechas más pequeñas y acuerdos comerciales que alivian las preocupaciones de la demanda, los operadores de la fibra están buscando las siguientes pistas.
Los desencadenantes alcistas podrían provenir de la evidencia de que Pekín está cumpliendo con la fase uno de su acuerdo con Washington al incrementar las compras de productos agrícolas estadounidenses. Dado que los aranceles aún están vigentes, algunos operadores también podrían sentirse alentados por las noticias sobre la manera en se realizarían esas compras, como a través de exenciones.
Por otro lado, la continua ausencia de China en el mercado de algodón de EE.UU. podría hacer que los precios vuelvan a bajar a 67 centavos por libra desde justo debajo de 70 ahora, dijo Keith Brown, presidente de la correduría de algodón Keith Brown & Co. en Moultrie, Georgia. Y en el improbable caso de que el Senado destituya a Donald Trump de la presidencia, la fase uno “tiene una posibilidad significativa de colapsar”, dijo Louis Rose de Rose Commodity Group en Nashville, Tennessee.
Para complicar el panorama de la demanda está el coronavirus, con la propagación de la enfermedad que intensifica los temores de una mayor desaceleración en los textiles chinos.
“Las acerías chinas parecían expresar un interés considerable en caídas de precios por debajo de 70 centavos e incluso más intereses una vez que los precios cayeron por debajo de 69.5 centavos por libra”, dijo O.A. Cleveland, profesor de economía agrícola en la Universidad Estatal de Mississippi. “Sin embargo, el negocio chino a corto plazo parece limitado”.
Más allá de las interrupciones del comercio y la salud, el algodón se enfrenta a un mayor uso de materias primas de la competencia, como el poliéster en la ropa. Por parte de la oferta, los productores estadounidenses enfrentan una creciente competencia de países como Brasil, donde una moneda débil aumenta la competitividad. Aun así, la recuperación de los precios desde agosto puede conducir a una mayor siembra.
Con tantos factores en juego, es probable que el mercado preste mucha atención al informe WASDE del gobierno de EE.UU. del próximo mes. A principios de este mes, el informe proyectó que la demanda se reduciría, pero solo a un nivel que rastrea una pequeña cantidad de la oferta.