Los precios del cobre repuntaron este martes, cuando los inversores volvieron a sumergirse cautelosamente en un mercado sacudido por el temor a que los problemas del grupo Evergrande pudieran traspasarse a la economía mundial.
A las 0930 GMT, el cobre a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres (LME) subía un 0.7% a US$ 9,099 la tonelada luego de hundirse el lunes a US$ 8,975, su nivel más bajo desde el 20 de agosto. El contrato ha perdido alrededor del 5% en lo que va de mes.
Los metales industriales cotizaban en línea con otros activos de riesgo como las acciones y el petróleo para estabilizarse tras la liquidación del lunes, ante una mayor confianza en que cualquier contagio de las dificultades de Evergrande sería contenido.
“Existe una preocupación general sobre la fortaleza de la economía global, pero tenemos el S&P (los futuros) cotizando con un alza de 1% esta mañana y las acciones que rebotan están invitando al apetito por el riesgo”, dijo Ole Hansen, de Saxo Bank en Copenhague.
“La perspectiva a corto plazo para el cobre es si podemos mantenernos por sobre los US$ 9,000 y evitar alguna liquidación a largo plazo adicional basada en acontecimientos a corto plazo, mientras que la perspectiva a largo plazo sigue siendo tan positiva como siempre”.
El cobre de la LME tendría que repuntar a US$ 9,225 para evitar pérdidas adicionales, agregó el estratega.
Los inversores también estaban pendientes de un ritmo más rápido de reducción de los estímulos en Estados Unidos. Los miembros de la Reserva Federal inician el martes una reunión de dos días que debiera concluir el miércoles.
Los mercados chinos están cerrados por feriados y volverán a abrir el miércoles.