En un entorno de negocios actual impulsado por la transformación digital, las tecnologías de la información y comunicación cobran un papel preponderante. Las organizaciones empiezan a acumular información de sus clientes la cual debe ser segmentada.
David Agreda Gamboa, docente de la carrera de Ingeniería de Sistemas e Informática de la Universidad Tecnológica del Perú (UTP), comenta que las empresas buscan cada vez más a especialistas capaces de analizar los grandes volúmenes de datos que se almacenan día a día.
Un estudio Talento Digital en el Perú, de Es Hoy en colaboración con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y MIDE Development, mostró que 8 de cada 10 empresas en la muestra (60 empresas) manifiesta haber tenido dificultades para llenar sus vacantes digitales recientemente.
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“Este alto porcentaje revela la escasez de mano de obra con las habilidades digitales requeridas (…) A pesar de las limitaciones para cubrir sus vacantes, las empresas en la muestra analizada manifiestan que han logrado contratar recientemente un número importante de trabajadores en ocupaciones digitales (2,942 trabajadores en total). En los últimos 12 meses, la mayoría de las contrataciones de personal TI se dio en las áreas: de desarrollo; diseño se software; y calidad”, precisa el informe.
Le sigue big data; infraestructura y plataforma; soporte técnico, entre otros.
¿Qué tipo información les interesa a las empresas para ser más competitivos y cuánto aportan los talentos digitales, más si se trata de analistas? La analítica de datos es el proceso de examinar conjuntos de información, permitiendo organizarla con la finalidad de identificar comportamientos y patrones.
En ese sentido, Agreda señala que todos los tipos de analítica son importantes para las empresas al momento de desarrollar estrategias competitivas. “Cada una tiene su oportunidad o momento de aplicación”.
“Así, por ejemplo, es importante primero conocer ¿qué está pasando en el negocio? (analítica descriptiva), luego ¿por qué está pasando ello en el negocio? (analítica diagnóstica), enseguida determinar ¿qué es lo más probable que pueda pasar posteriormente al negocio? (analítica predictiva) y finalmente ¿qué necesito hacer para establecer la mejor acción a seguir en el negocio? (analítica prescriptiva)”, explica.
Con todo lo anteriormente considerado, el desarrollo (formulación e implementación) de estrategias competitivas será muy efectivo para cualquier negocio.
¿Qué se logra?
1. Fidelización. La analítica de datos nos ofrece información del comportamiento de los clientes actuales o de los que podríamos tener. Ello nos permitirá tener una mejor interacción.
2. Personalización. Los productos o servicios estarán “a la medida” del cliente, eso hará que sientan que en la empresa encuentran lo que estaban buscando.
3. Reducción del stock. Como ya se sabe qué es lo que busca el cliente, la empresa empezará a producir según su consumo y los productos pueden venderse rápidamente.
4. Respuesta rápida. La capacidad de reacción mejora, pues ya se sabe las demandas de los clientes. Incluso, nos podemos anticipar a ello.
5. Mejor estrategia competitiva. Hoy en día, una de las armas más poderosas que puede tener una organización es la información. De esta manera, se podrá analizar qué estrategia funcionaría mejor para usarla frente a la competencia.
6. Mayor productividad. Gracias a los datos obtenidos, se puede simplificar algunas tareas y la empresa se evocará a lo que realmente se requiere: incrementar los ingresos.
Para el docente de la UTP, hoy más que nunca las organizaciones requieren de profesionales que tengan diferentes formas de analizar los datos con los que cuentan las mismas.
“De esta manera, se puede proporcionar cantidades variables de valor a un negocio, dependiendo de la etapa de ciclo de vida en la que se encuentre la empresa”, menciona.
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Campo de acción
Dada la competencia profesional (conocimiento, experiencia y habilidades) con que cuenta un analista de datos, su aporte de valor resulta “vital” en una organización.
“Está calificado para describir, diagnosticar, predecir y prescribir oportunamente todo lo que está pasando en la empresa antes, durante y después de las acciones desarrolladas. Su campo de acción es amplio y puede contribuir como personal de apoyo o soporte en las principales actividades de la cadena de valor de un negocio como áreas de logística, producción, operaciones, servicio al cliente, entre otras”, comenta Agreda.
Asimismo, dijo que desde la academia, se impulsa el desarrollo de nuevos perfiles que se requieren en este campo.
“Estamos por lanzar un curso electivo sobre data, impulsado por la Dirección de Empleabilidad. Con ello buscamos fortalecer los conocimientos que van a necesitar en esta nueva realidad, así como las habilidades blandas para cumplir con los objetivos que la empresa requiera. De esta manera, se vuelven más empleables en el mercado laboral”, sostuvo.
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