El sector textil peruano viene recuperándose del golpe recibido por la crisis económica ocasionada por la pandemia. En el mercado local, a pesar de las restricciones dictadas por el Gobierno para evitar la propagación del virus, las ventas han ido mejorando en los últimos meses.
La misma situación se puede apreciar en las exportaciones que podrían cerrar el año igualando los niveles registrados en el 2019, cuenta a Gestión.pe, Luis Antonio Aspíllaga, presidente del gremio de la indumentaria de la Cámara de Comercio de Lima (CCL).
El mercado interno, según detalla el líder del gremio, se contrajo durante el año pasado por las medidas de confinamiento para controlar el nivel de contagios de la COVID-19. No obstante, en el primer trimestre del 2021, se ha notado una recuperación que llena de optimismo al sector con miras al cierre del primer semestre.
“Ha habido un factor que ha apoyado al mercado local, la crisis en India. El sector textil de ese país es muy grande y abastece al Perú. Sabemos por varios asociados al gremio que no está entrando mercadería del Asia, principalmente de India y China; que están usando su capacidad para producción interna. Por eso, limitan las importaciones que es la competencia directa de los empresarios locales”, explicó Aspíllaga.
Esta situación provocó que los proveedores de tela estén al tope de su capacidad. En febrero, los productores textiles anunciaron que sus volúmenes de producción estarían cargados hasta julio por la necesidad de abastecer a fabricantes locales.
“Es una buena noticia. Esperamos que los compradores, distribuidores y fabricantes locales de prendas se den cuenta de la calidad y servicio del producto local; además, sigan manteniendo esos volúmenes de venta para que más adelante cuando los mercados asiáticos se vuelvan a abrir no se revierta la situación”, comentó el empresario.
En el caso de la industria textil, productora de telas, ha sido un buen cuatrimestre. Aspíllaga considera que cerrarán bien los primeros seis meses del año. No obstante, considera necesario que el Gobierno flexibilice medidas sin arriesgar la salud de los peruanos, sobre todo en el sector comercio, para recuperar los niveles de venta previos a la pandemia.
Los empresarios textiles nacionales están apostando mucho elaborando prendas de las fibras que produce el país. Asimismo, las ventas a través de redes sociales han tenido una buena respuesta por parte de los consumidores.
Exportación
Estados Unidos es el principal destino de las exportaciones textiles peruanas con el 70% del total de envíos. Le siguen Brasil, Canadá, Alemania y Chile. En el mercado norteamericano, el consumo se está recuperando debido a la campaña de vacunación, pues más de 100 millones de ciudadanos ya recibieron al menos una de las dosis contra la COVID-19.
“Las ventas están buenas en Estados Unidos. Los clientes que venden y ofrecen sus catálogos por internet han disparado sus ventas. Asimismo, se proyecta una mejora entre el 30% en su comercialización”, comentó.
Las dificultades existentes en el mercado asiático, también ha favorecido a Perú. Los envíos llegan en menos tiempo, además, la calidad de sus materiales es cada vez más apreciado. Aspíllaga señala que el denominado ‘Fast Fashion’, prendas de prácticamente un solo uso, está dejándose de lado, por el contrario, se viene impulsando la compra de textiles de calidad.
La ventaja del Perú es que no importa hilados, ni telas, solo usa fibras locales como alpaca y variedades de algodón. “Tenemos en ese sentido una cadena de producción más rápida que la de Asia.”, comentó el empresario.
Los problemas en los puertos provocan retraso en los envíos de mercadería, sobre todo aquellos provenientes del oriente. Perú tiene la ventaja de cercanía a los Estados Unidos y realiza sus despachos por avión y vía Miami. Eso ha hecho despertar el interés de los clientes que vienen comprando a 45 días hasta dos meses para ir midiendo la situación.
Por ahora, se viene trasladando la mercadería para la campaña del Día del Padre. “Es un reto porque hay que trabajar más rápido. Hay posibilidades reales de crecer y llegar a volúmenes del 2019 y tal vez un poco más”, concluye el empresario.