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En el sétimo día del paro nacional iniciado por gremios de transportistas de carga, aunque se redujo a solo una la vía bloqueada por manifestantes que apoyan esa huelga, la falta de camiones afecta sobre todo el movimiento de mercancías de exportación e importación por el Callao.
Si bien el puerto del Callao suele recibir un flujo diario de cerca de 5,000 camiones que ingresan mercancías de exportación o sacan las de importación, ayer hasta horas de la tarde apenas se observó el movimiento de unos 12 camiones, según operadores de comercio exterior.
¿Cuánta mercancía permanece inmovilizada?
La Asociación Peruana de Agentes Marítimos (APAM) informó a Gestión que, según reportes de los operadores portuarios, entre otras mercancías inmovilizadas hay cerca de 80 mil toneladas de trigo, maíz y soya importados que permanecen en buques acoderados en el Muelle Norte del Callao, que no se pueden descargar.
Sabino Zaconeta, gerente general de APAM, detalló que el buque Endurance por ejemplo, arribó a ese terminal portuario el pasado miércoles 23, y hasta este lunes no podía descargar todo su cargamento de 55 mil toneladas métricas de granos.
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A su vez, otros dos buques con 30 mil toneladas métricas de maíz, torta de soya y otros graneles, tampoco podían hasta hoy descargar esos granos desde el pasado miércoles.
En total, contabilizó diez buques acoderados en el Muelle Norte, que no podían movilizar sus cargamentos, no solo de granos, sino también con productos de metal, minerales, cerámicos, entre otros tipos de carga suelta, y otros ocho buques en cola esperando ingresar al puerto, es decir en total 18 buques afectados por la falta de camiones.
Por tal razón, Zaconeta invocó a las autoridades y transportistas de carga a alcanzar una tregua que evite que se sigan afectando los embarques de importación y también de exportación.
Vale recordar que, en su momento, Adex estimó que cada día de paralización de camiones estaba generando pérdidas en torno a los US$25 millones.
¿Qué impactos habrá en los usuarios?
Por su parte, la Asociación Marítima del Perú (Asmarpe,que representa a las líneas navieras que operan en Perú) reclamó que el Estado no está ofreciendo planes de contingencia (ante el paro camionero) señalando que está en juego el poder mantener adecuadamente el movimiento de los 2.5 millones de contenedores que recibe anualmente el puerto del Callao.
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Moises Woll, presidente de Asmarpe, advirtió que, poder digerir la acumulación de contenedores para exportación e importación (no atendidos en el puerto por la ausencia de camiones) va a tomar semanas, y va a generar pérdidas y sobrecostos para todos los actores de la cadena logística.
“En estos momentos, el reto para las navieras es que los operadores portuarios puedan embarcar todos los contenedores programados y evitar las postergaciones o cancelaciones de embarque. Cada naviera hace lo imposible por evitar la cancelación de recaladas”, aseveró.
Subsidio directo
En tanto, hasta el cierre de este informe, los dirigentes de los transportistas de carga que acatan la huelga seguían esperando que haya acuerdos respecto a las nuevas exigencias que plantearon al Gobierno a fin de que estén dispuestos a deponer su medida de fuerza.
Javier Marchese, presidente de la Unión Nacional de Transportistas de carga en Camiones (UNT-Perú) indicó a Gestión que, en vista que varias de sus propuestas deben ser atendidas mediante proyectos de ley cuyo debate y aprobación tomará tiempo en el Congreso, ahora piden al Ejecutivo que apruebe las mismas medidas requeridas, vía decretos de urgencia.
Una de esas medidas es la devolución de un 70% del Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) al diésel, pero que se aplique sin un requisito de antigüedad de vehículos, como establece una de las propuestas legales para debate en el Parlamento.
Otra es que, vía DU, se establezca la obligatoriedad de implementar costos mínimos para el transporte de carga, para efectos del pago de impuestos y el reconocimiento de sus costos reales (de forma que ese costo se traslade a sus fletes).
En cuanto a su reclamo para que baje el precio del diésel, indicó que ahora están exigiendo que el Gobierno establezca un subsidio directo por su consumo de ese derivado, a razón de S/4.00 por galón para empresas de transporte con hasta diez camiones.
Hasta ahora, ese gremio pedía que el Gobierno reduzca el precio mayorista del diésel, desde los S/18.00 actuales, hasta S/13.50 por galón.
