Toyota, el mayor fabricante de automóviles del mundo, reveló que invertirá unos US$ 3,400 millones (2,930 millones de euros) para producir baterías en una planta que construirá en Estados Unidos.
La inversión de diez años forma parte de un proyecto anunciado el mes pasado por la firma japonesa para destinar 1.5 billones de yenes (US$ 13,100 millones) en el desarrollo y suministro de baterías para vehículos eléctricos, al mismo tiempo que intenta buscar que su producción consiga emisiones de dióxido de carbono netas iguales a cero.
“El compromiso de Toyota con la electrificación consiste en lograr la sostenibilidad a largo plazo para el medioambiente, los empleos y los consumidores estadounidenses”, señaló Ted Ogawa, director ejecutivo de Toyota Motor North America.
La compañía no ofreció más detalles como el sitio y la capacidad de producción, pero indicó que establecería una nueva compañía para el proyecto estadounidense.
En junio, Toyota anunció que tenía como objetivo hacer que su producción fuera neutra en carbono para el 2035, adelantando así la fecha marcada anteriormente del 2050.
Toyota es pionera en vehículos híbridos y automóviles que utilizan combustible de hidrógeno y también está intensificando el desarrollo de automóviles eléctricos que funcionan con baterías.
El año pasado, el ex primer ministro de Japón, Yoshihide Suga, estableció una fecha límite del 2050 para que la tercera economía más grande del mundo se convierta en carbono cero, lo que reafirmó de manera significativa los compromisos del país nipón con el cambio climático.
Japón combate por reducir las emisiones de carbono después de cerrar los reactores tras el accidente del 2011 en la planta de energía nuclear de Fukushima.