La cadena estadounidense de cafeterías Starbucks anunció este lunes su retirada del mercado ruso, donde llevaba operando 15 años, uniéndose a otras empresas como McDonald’s o Exxon Mobil que han tomado medidas similares en reacción a la invasión rusa de Ucrania.
La cadena cerrará 130 locales en todo el país, que aportan menos de un 1% de sus ingresos anuales, según un comunicado de la compañía.
La empresa ya había anunciado la suspensión de sus actividades comerciales desde el pasado 8 de marzo.
Entonces, Starbucks subrayó su condena “a los horribles ataques de Rusia en Ucrania” y avanzó que, a medida que evolucionara la situación, continuaría tomando medidas que fueran en línea con sus “valores”.
Starbucks apuntó que pagará una compensación de seis meses de salario a los en torno a 2,000 trabajadores que la empresa tiene en Rusia.
La cadena de comida rápida McDonald’s anunció el pasado marzo el cierre temporal de sus 850 locales en Rusia y la congelación de sus operaciones, lo que supuso un golpe considerable dada la implantación de la cadena en el vasto territorio ruso.
El grupo McDonald’s anunció la pasada semana que llegó a un acuerdo para vender su negocio en Rusia al empresario y socio de la franquicia Alexandr Govor, lo que permitirá conservar decenas de miles de puestos de trabajo.
“Según las condiciones del acuerdo, el señor Govor adquiere toda la cartera de restaurantes de la cadena y la va a desarrollar bajo una nueva marca”, señaló McDonald’s en un comunicado, que destaca que el empresario ruso es socio desde el 2015 y que en Siberia operan 25 franquicias abiertas por él.