El puerto de Paracas ha anunciado la incorporación de una nueva grúa móvil que aumentará la capacidad de su terminal en un 50%, elevando la capacidad mensual de carga y descarga a más de medio millón de toneladas, incluyendo carga general y contenedores.
Esta nueva infraestructura ha requerido una inversión cercana a los US$ 5 millones y se espera que esté operativa a partir de octubre de este año. Su incorporación permitirá reducir los tiempos de operación para los clientes del puerto, aumentando la eficiencia en la gestión.
La grúa móvil adquirida es una MHC Liebherr 420 con una capacidad de carga de 124 toneladas. Con un peso de 371 toneladas, una pluma de 48 metros de longitud y una altura máxima de izaje de 44 metros, se convierte en la tercera grúa móvil en el puerto de Paracas, complementando a las dos MHC Liebherr 550 que operan desde 2019.
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Rabí Vilela, subgerente comercial del puerto, destacó la versatilidad de la MHC Liebherr 420 para manejar distintos tipos de carga, desde granel hasta contenedores. La incorporación de esta tercera grúa móvil promete aumentar la productividad del terminal, lo que se traduce en tiempos de operación más cortos para las embarcaciones y, en última instancia, en ventajas para importadores y exportadores.
Según Vilela, el puerto de Paracas ha experimentado un crecimiento del 50% en el movimiento de contenedores de 20 pies (Teus) entre enero y agosto de este año en comparación con el mismo período del año anterior. Este crecimiento se ha impulsado por proyectos eólicos en el sur de Perú y un enfoque empresarial centrado en brindar servicios adicionales a los clientes de su área de influencia.
Además, el puerto de Paracas ha diversificado sus servicios para incluir carga de contenedores, automóviles, exportación de acero, congelados de pescado y más. El objetivo es aumentar la competitividad de las empresas peruanas, especialmente en el sur del país, aprovechando la ubicación estratégica del puerto y las condiciones climáticas favorables que permiten operaciones continuas sin cierres debido al viento y la marea. El puerto también se ha preparado para enfrentar el fenómeno del Niño con un menor impacto en su zona de influencia en comparación con otras áreas del país.
