Luego de su reactivación en el segundo trimestre del 2023, la mina de cobre Las Bambas (Apurímac) de la empresa china MMG vuelve a enfrentar manifestaciones sociales. Desde el domingo 19 de noviembre, el sindicato de trabajadores de la mina inició una huelga de tres días, como parte de sus demandas para mejorar los protocolos de participación en las ganancias.
Sobre dicha manifestación, una fuente cercana a la compañía mencionó que la medida es acatada de forma “parcial y pacífica”. Asimismo, indicó que la empresa es respetuosa de los derechos laborales y trabaja para garantizar un entorno laboral seguro para sus trabajadores.
Además, agregó que la convocatoria de la protesta por parte de los trabajadores había sido declarada “improcedente” por el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE).
Por su parte, Erick Ramos, secretario general del sindicato de trabajadores de Las Bambas, señaló hoy que la huelga duraría 48 horas y que este colectivo exigiría una mejor distribución de las ganancias para los trabajadores. Asimismo, declaró a Reuters que están considerando una huelga indefinida a partir del 28 de noviembre próximo si la empresa no cumple con sus demandas.
Minera Las Bambas, que inició operaciones en el 2016, es el quinto productor de cobre del Perú con una participación de 11% de enero a septiembre del 2023 con 221,160 toneladas métricas finas de cobre y un crecimiento de 21.7% frente al mismo periodo del 2022. Perú, a su vez, es el segundo mayor productor mundial del metal rojo.
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Las huelgas en Las Bambas
A mediados de marzo último, MMG Las Bambas reactivó sus operaciones de manera interrumpida con el transporte de cobre concentrado, insumos y personal. Sin embargo, la empresa acumuló a esa fecha 68 días de bloqueos el 2023, 173 días el 2022 y 661 días de paralización desde que inició operaciones en 2016, por conflictos sociales alrededor de su zona de operaciones.
En su momento, Álvaro Ossio, CFO de MMG Las Bambas, explicó que cada día de exportación perdida representa US$ 9.5 millones y, en consecuencia, S/ 5.2 millones entre regalías e impuesto a la renta que el Estado deja de recaudar. De ese monto, más de la mitad (S/ 3.2 millones), se distribuye entre el gobierno regional, municipios locales y dos universidades.
Para Las Bambas, el 2022 fue el año de menor producción, pues solo registró 254,000 toneladas de cobre concentrado, volumen 45% menor a la producción promedio de 400,000 toneladas. Así, el PBI de Apurímac disminuyó en 7.4 puntos porcentuales.
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