El hotel que está construyendo en Cabo Blanco (Piura) la empresa de ecoturismo Inkaterra generará un nuevo destino internacional que atraerá a visitantes hacia un circuito de al menos 20 playas, que van desde Negritos (en el mismo departamento de Piura) hasta Zorritos (Tumbes), sostiene el presidente de la firma, José Koechlin.
El modelo que Inkaterra se propone emular para su nuevo proyecto es el de Nihi Hotels, situado en una isla de Indonesia. Este se encuentra especializado en turismo de surfing y fue elegido el mejor establecimiento del mundo por Travel & Leisure durante dos años consecutivos. A menudo ha hospedado a celebridades de la talla de Victoria Beckham.
James W. McBride, CEO de Nihi Hotels, visitó la semana pasada Cabo Blanco para ser testigo del potencial de esta zona del país para el turismo de surfing de lujo, según indicó el empresario peruano.
“Es algo completamente nuevo para el Perú y McBride ya ha dado fe del potencial que tiene el país para desarrollar este tipo de turismo. Lo que se busca es que el hotel Inkaterra Cabo Blanco sea un desarrollo de nicho de mercado. La opinión de McBride es que con esto Cabo Blanco será puesto dentro del circuito mundial de surfing”, dijo Koechlin a gestion.pe.
Pese a que en agosto del año pasado el empresario anunció la apertura de este hotel para el primer semestre de 2021, los retrasos generados a raíz de la pandemia lo han conducido a reprogramarla para fines de año. Es decir que el próximo verano estará a disposición del público.
La apuesta principal de este proyecto es un hotel característico de la marca: compuesto por unas 60 cabañas o casitas para entre una y tres personas cada una, además de un pabellón principal, ubicados frente al mar, a lo largo de dos kilómetros de playa.
“Las casitas reflejan lo que pide el mercado hoy en día, que es el contacto con la naturaleza y el espacio personal. El futuro inmediato del turismo entendemos que va a llevar esta tendencia”, sostuvo.
Además, incluye la creación de une pequeña reserva marina y la construcción de un condominio para el ecoturismo. El 40% de los lotes de este ya se encuentran vendidos.
Cabo Blanco cuenta con una mística especial desde que en 1956 el nobel de Literatura Ernest Hemingway llegó a sus costas para filmar la pesca de un merlín negro, con el fin de que esas imágenes fueran utilizadas para una película inspirada en su novela “El viejo y el mar”.
La creación de un destino que sea puesto ante los ojos del mundo, destaca Koechlin, tendrá un impacto directo en el resto de los negocios de Cabo Blanco, así como en las 20 playas que van desde Negritos (Talara, Piura) hasta Zorritos (Tumbes). Según indica, en ellas hay más de 40 puntos de surf que serán beneficiados con un mayor movimiento económico.