Tras varios trimestres con resultados financieros complicados, el gigante retailer chileno Falabella perdió recientemente su grado de inversión, luego de que la agencia Fitch Ratings bajara su calificación de “BBB-” a “BB+”, además de la asignación de perspectivas negativas a la compañía.
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“Fitch considera que los planes de Falabella para mejorar su trayectoria de endeudamiento son insuficientes para mantener su clasificación de grado de inversión. (Se estima) que el apalancamiento de Falabella se mantendrá superior a 6x en 2024, y que llegará a niveles bajos de 5x en 2025”, explicó la agencia de calificación crediticia, que también le otorgó una perspectiva negativa a Sodimac.
En el mismo día, la empresa anunció un nuevo movimiento en su estructura. Falabella y su filial Plaza S.A. han suscrito un memorándum de entendimiento (MdE), el cual busca el traspaso de sus activos en Perú.
“La finalidad es que ambas partes desarrollen los análisis pertinentes y procedan a negociar de buena fe un acuerdo marco en el que se regularán los términos y condiciones y estructura de una eventual transacción consistente en la integración en Plaza de activos inmobiliarios ubicados en Perú, de propiedad de Falabella Perú y sus filiales”, indicó la empresa mediante un comunicado.
Dicho movimiento contempla un proceso de análisis, negociación y valorización que llegaría hasta los 120 días. En tanto, Falabella sostuvo que los activos peruanos deberán incluir centros comerciales tipo mall y power centers.
Falabella Perú S.A.A. es filial de Falabella S.A., e incluye actualmente a las empresas Mallplaza Perú S.A. y Open Plaza S.A.
Así, Plaza S.A. (Mallplaza), que tiene el 33.3% de la participación en Mallplaza Perú, adquirirá el 100% de este último. Con ello se haría también de los 11 establecimientos de Open Plaza en Perú, que representan 323,000 m2 adicionales.
“Falabella, así, pasaría a operar en Perú bajo una única estructura inmobiliaria, en línea con la estrategia de la compañía de ser cada vez más simple y eficiente en su operación”, agregó la empresa.
La forma de financiamiento de la operación será negociada entre las partes y fijada en el Acuerdo Marco.
En tanto, los efectos financieros que la operación generaría para el Grupo Falabella no podrán determinarse mientras no se conozca su monto y no se establezca su estructura de financiamiento, señaló la compañía.
Hace unos días, la compañía chilena anunció un plan de venta de activos, principalmente inmobiliarios, que le permitirá recaudar entre US$ 800 millones y US$ 1,000 millones en un período de 12 a 15 meses, el cual se trata de un incremento del plan de venta de US$ 300 millones a US$ 400 millones en activos, anunciado hace algunos meses.
Al cierre del tercer trimestre, Falabella registró una disminución del 10% en sus ingresos frente al similar período del año pasado. La compañía apunta a profundizar los ahorros generados en el 2023: en el tercer trimestre del año, el retailer logró reducir su deuda financiera neta en un 5% frente al año pasado.
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