Además de la crisis sanitaria, la emergencia climática se ha posicionado como uno de los problemas que más preocupan a la población mundial.
Para muchos, uno de los grandes cambios que dejará el covid-19 a largo plazo en nuestra sociedad, es el surgimiento y valorización de modelos económicos que sean más sostenibles a largo plazo con el planeta.
Hoy, una de las estrategias más populares para favorecer esos modelos más sostenibles es la de la economía circular, un término que se ha vuelto muy popular recientemente.
¿En qué consiste precisamente? La economía circular es una estrategia que tiene como objetivo reducir tanto el ingreso de materiales vírgenes al ecosistema como la producción desechos, cerrando de esta manera el flujo económico y ecológico de los recursos naturales.
Así lo señaló Gustavo Chopitea, fundador de la empresa Reciqlo, una empresa construida bajo los principios de la economía circular y que se enfoca en el reciclaje de productos de vidrio. “Bajo esta estrategia, no hay nuevos ingresos de materiales vírgenes por lo que se crea un círculo perfecto que beneficia al medio ambiente”, precisó el ejecutivo.
Reciqlo es una empresa que se enfoca en el proceso de reciclaje de vidrio, debido que es un material 100% reciclable y es muchas veces dejado de lado por los recicladores urbanos. La compañía argentina -que ya aterrizó en Perú- genera tres productos derivados del vidrio para la construcción y para revitalizar cultivos. “El objetivo es reintroducir el vidrio al mercado y generar un impacto verdaderamente positivo en los basureros del país”, reveló Chopitea.
Beneficios
Para el ejecutivo el principal beneficio de la economía circular, es que esta busca imitar los procesos de la naturaleza. “Nada se desperdicia, todo sirve y se reutiliza”, apuntó.
Explicó que otro gran beneficio es la optimización de recursos, que contribuyen a aminorar el impacto de las industrias en el medio ambiente. “Es una de las industrias con mayor proyección a largo plazo; la idea es transformar la basura en materiales útiles, América Latina se encuentra en el despertar de la economía circular”, agregó.
Asimismo, comentó que tanto las empresas que surgen bajo este modelo o aquellas que se unen para trabajar junto a estrategias de economía circular, están frente a la oportunidad de un gran negocio de bajo impacto.
“Se necesita que tanto el sector público como el privado impulsen iniciativas para que la población tome mayor conciencia sobre la importancia del cuidado del medio ambiente”, dijo Chopitea.
Algunos ejemplos de materiales que se pueden utilizar para la economía circular son cartón, vidrio, plástico, neumáticos, aluminio, entre otros.
Industria del vidrio
En el caso del vidrio, el ejecutivo precisó que menos del 2% del total de la producción se recicla, el resto se convierte en residuos. “El vidrio es muchas veces dejado de lado por los recicladores urbanos porque es pesado, es peligroso y no tiene un alto valor; por eso nos hemos enfocado en este material”, precisó el director de Reciqlo.
Para esto la empresa ha diseñado unas máquinas que reducen en siete veces el volumen del vidrio. La empresa ya tiene alianzas con municipios de Argentina y Perú y también trabajan de la mano del sector privado para reducir la cantidad de vidrio sin reciclar en el mundo.
“Si queremos salvar al planeta, debemos reducir el uso de los envases de un solo uso. No solo de los de bebidas, sino también lo que se utiliza como empaque. Estamos en un punto en el que ya no alcanza solo con reciclar, se debe reducir la circulación y despojo de estos, o el daño será irreversible”, explicó el ejecutivo.
Agregó que hoy reciclar envases es vital para la conservación del medio ambiente, pero es solo un eslabón de una grande y pesada cadena. “Es hora de que las gobiernos y las comunidades tomemos conciencia y nos volvamos responsables de la forma en que vivimos y consumimos. Reciclar hoy es cuidar el futuro”, agregó.