Luego que durante la primera cuarentena los clubes registraran hasta un triple de nivel de morosidad respecto a la etapa precovid, hoy advierten que con las nuevas disposiciones del gobierno puedan volver a niveles similares.
Así, según la Asociación de Gerentes y Administradores de Clubes, Condominios y Afines (Asogeclub), hay un riesgo que algunas organizaciones pierdan hasta el 60% de los ingresos mensuales y se pueda llegar a un nivel de morosidad del 40%, cuando, en circunstancias normales, no supera el 20%.
Según su representante, Juan Carlos Romero, los clubes podrían registrar una baja en las cuotas, así como retrasos de pagos lo que perjudicaría a más de 8,000 trabajadores indirectos y 5,000 indirectos en los 28 clubes y 1,300 condominios con club (ubicados en la Panamericana Sur a partir del kilómetro 20).
Con ello, están convocando, además de los clubes, a federaciones deportivas, así como el Instituto Peruano del Deporte para que puedan ser considerados como una actividad esencial y puedan reactivar sus operaciones.
Por otro frente, la Asociación Nacional de Clubes Deportivos y Culturales del Perú (ANCP), junto con Asogeclub, remitieron una carta a la primera ministra Violeta Bermúdez y al Minsa a fines de enero en la que solicitan que los clubes sean considerados de la misma manera por el fomento a la actividad física.
Asimismo, precisó que, ante la probable aglomeración en espacios públicos por las flexibilidades de la nueva cuarentena, se podría dispersar la concentración de personas y, generar un ahorro al Estado por concepto de atención en salud mental. Según sus cálculos, se podría prevenir un gasto de S/4 millones semanales en función a la cantidad de asociados que son cerca de 100 mil.
Regatas
Por su parte, Juan Carlos Romero, quien también es administrador general del Club Regatas (457 hectáreas) que tiene seis sedes y 20 mil asociados activos, sostuvo que los clubes, en general, tuvieron que invertir en los protocolos sanitarios, además de registrar los niveles de pérdida de ingresos por la alta morosidad.
Además, de las 70 concesiones que tienen, la gran mayoría no pudo acceder a Reactiva por lo que, antes de las nuevas disposiciones, siete restaurantes de más de 10 establecimientos de alimentos y bebidas pudieron reabrir, además de entidades financieras, farmacias y una boutique de ropa.
Recordó que la aprobación de la exoneración del Impuesto a la Renta y el Impuesto Temporal a los Activos Netos (Itan) a las asociaciones sin fines de lucro hasta el 2023 fue oportuno antes las circunstancias luego de la suspensión perfecta a cerca del 50% de la fuerza laboral en el club que comprende 380 familias.
Lawn Tennis
En el caso del Lawn Tennis (4,200 m2), al no contar con la organización de eventos, así como algunos deportes, esto ha mermado en cerca de dos tercios de sus ingresos mensuales. Con ello, tuvieron que replantear sus instalaciones para generar nuevos ingresos.
“Un tercio representa el alquiler de espacios para eventos culturales y, el otro tercio son canchas para deportes como fútbol, básquet y vóley. El club hoy en día genera aportes con las membresías de los asociados, aunque aún están pagando deudas del 2020 y ahora se trabaja con el 50% de estas”, indicó a Gestión Hans Cáceres, gerente general del Club Lawn Tennis.
“Proyectamos un déficit de S/1.5 millones. Tuvimos que aplicar factoring, fuimos pulcros en cobranzas a terceros por uso de instalaciones y generamos diversas eficiencias, así como una campaña agresiva de captación de asociados en tanto en 2020 ingresaron más de 200 nuevos cuando, mientras que, en los últimos seis años, apenas entraron 180 personas”, explicó.
Los planes del club iban por generar academias y seguir captando socios con lo que esperan llegar, a partir de este año, a alcanzar los 1,800 asociados activos pagantes, en tanto hoy tienen 750 y 250 son vitalicios. El plan en el mediano plazo es buscar una segunda sede en un horizonte de cinco años.
Jockey Club
En el caso del Jockey Club del Perú (80 hectáreas), dicha entidad registraba, antes de la pandemia, el 90% de sus ingresos por las actividades hípicas, 15% por cuotas de socios y lo restante por eventos. Tras la suspensión de lo último y otro nivel de morosidad, hoy el 90% de los ingresos vienen por la hípica (75% de esto por juegos en agencias y el resto por una plataforma propia de juego) y el 10% por sus socios, de los cuales el 40% son vitalicios y 2,500 son pagantes.
Pese a la pandemia, el club invirtió en mejoras como la modernización del sauna y mejoras en las pistas del área hípica, lo que supuso una inversión de S/500 mil. Además, tuvieron que aplicar la suspensión perfecta al 55% de sus trabajadores que eran 400.
De por sí, el club no venía del todo bien en los últimos años en tanto en 2017 registró pérdidas por S/17 millones; en 2018, S/8 millones; en 2019, S/7 millones; y, en 2020, se estima una pérdida de S/1.5 millones, según Danilo Chávez, miembro del directorio.
“El club está revirtiendo las pérdidas con una política de control de gastos y eficiencias, aunque, por eventos, se generaban cerca de S/10 millones anualmente”, dijo.
Las Terrazas
Para el Club Las Terrazas, que tiene cuatro sedes y 3,900 socios –y poco más de 700 socios vitalicios-, sus ingresos vienen por los asociados (90%) y academias, además de concesionarios. Pese a que negociaron con el sindicato de trabajadores del club, los sueldos de algunos funcionarios se redujeron hasta en un 30% para mantener la operación.
“Si la morosidad podía llegar al 20%, en pandemia llegamos casi al 50%. Fuera de eso, hicimos un recorte del 30% hasta noviembre de la cuota mensual porque los socios no iban a disfrutar de las instalaciones”, acotó Ángel Cáceres, gerente general de Las Terrazas.
“Todos los clubes tienen la necesidad de llenarse con nuevos socios, pero durante la pandemia no ingresaron nuevos. La venta empezó en octubre y, antes de la pandemia, ingresan 5 por mes en promedio.
Asimismo, la ampliación de vestuario de caballeros, desarrollo de zona de jóvenes y construcción de dos bungalows en Chaclacayo fueron las inversiones que se postergaron por la pandemia por S/1.5 millones.