Factores como el incremento de precios en los costos de construcción, terrenos y tasas hipotecarias, han obligado a las personas a optar por viviendas de menor tamaño, pues buscan no ser perjudicados con el aumento de precios. Esta tendencia ha sido identificada por Cantabria Inmobiliaria, que se encamina a crecer a doble dígito con nuevos proyectos hacia la segunda mitad del año.
Alejandro Burgos, gerente comercial de Cantabria Inmobiliaria, comentó que, pese a un desenvolvimiento plano del sector, el objetivo para la empresa será crecer 10%. Durante los primeros meses del año, la empresa incrementó sus ventas en 3% y colocó alrededor de 100 unidades, con una recaudación de S/48 millones.
Para lograr el objetivo comercial, la inmobiliaria iniciará dos proyectos para el tercer y cuarto trimestre. “El más cercano estará ubicado en Miraflores, con una inversión superior a los S/30 millones de soles. Asimismo, el otro aún se encuentra en etapa de evaluación, pero esperamos que se concrete antes de finalizar el año”, dijo el directivo de Cantabria.
“Cada año tratamos de mantener tres nuevos proyectos, por lo que el 2024 deberíamos cerrar por lo menos con 12 en total. En lo que respecta al avance de obras, no hemos presentado retrasos y vamos a cumplir con las fechas previstas en todas nuestras construcciones”, explicó el ejecutivo.
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Retos y oportunidades
Según el directivo, la demanda del sector se ha centrado en Lima Centro, Lima Top y Lima Moderna, pero la empresa identifica mayores oportunidades en esta última. “Vemos que hay una mayor dinámica en ventas, mayor afluencia de personas y predisposición para mudarse a estas zonas”, explicó.
Agrega que las personas están comprando departamentos más pequeños y de menor valor, migrando marcadamente de opciones de tres dormitorios a dos. Bajo este nuevo contexto, el ticket promedio ha disminuido desde el medio millón de soles a situarse entre S/ 400 mil y S/ 450 mil en promedio.
“La intención de compra existe, pero debido a la subida de precios en los costos de construcción, terrenos, tasas hipotecarias y algunas dificultades con las municipales, las personas optan por soluciones inmediatas como alternativas de menor tamaño”, puntualizó Burgos.
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Características de la demanda
Entre las principales características identificadas por el directivo, se sitúa el reducido tiempo que invierten las personas en el proceso de compra. “Vemos que no profundizan en la búsqueda de una vivienda, pese a ser una compra trascendental. Lo que se evidencia es que existe temor o desconfianza hacia los vendedores, lo cual es un reto a superar por parte de las inmobiliarias”, mencionó.
Entre otros rasgos del comprador actual, Burgos destacó que los requerimientos de contar con gimnasios fueron desplazados por áreas para mascotas y trabajo. “Las personas quieren hacer deporte fuera y actualmente valoran más las zonas para la entrega de delivery bien diseñadas, así como salas de co-working, para recibir colegas o clientes en el edificio, pero fuera del departamento”, dijo.
Con relación a las alternativas sostenibles, Burgos señaló que aún no es un gatillador para concretar una compra. “Nosotros estamos realizando viviendas sostenibles por convicción, debido a que sabemos que no es un valor agregado que aprecia el cliente”, finalizó el ejecutivo.
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