Los planes en el Perú de Canopy Growth, la empresa de cannabis más grande del mundo

Desde el año pasado, a través de Spectrum Therapeutics, la división médica de la transnacional, Canopy Growth ha trabajado para introducir al mercado peruano sus productos de cannabis medicinal. Y aunque la pandemia pudo haber ralentizado algunos planes, el primer hito se alcanzó durante la cuarentena con la aprobación del registro sanitario del aceite derivado de cannabis Yellow Oil, cuyo principal componente es el cannabidiol (CBD, cannabinoide no psicoactivo)

“El COVID-19 afectó la dinámica empresarial en todo el mundo. Sin embargo, es importante tomar en cuenta el aporte de los sectores de cannabis medicinal y de cáñamo industrial dentro de las estrategias de desarrollo poscoronavirus, porque pueden tener un rol importante en el Perú y beneficiar su economía”, comenta Wanderley Mariz, vicepresidente de relaciones Gubernamentales e Institucionales para Latinoamérica de Canopy Growth.

Medicinal

El representante de Canopy Growth explica que el negocio del cannabis tiene tres ejes: el cannabis medicinal, el de uso adulto o recreativo y la industria del cáñamo.

En cuanto a la línea medicinal, Mariz comenta que, a través de Spectrum Therapeutics, la compañía quiere avanzar rápido. “Estamos trabajando para tener productos estandarizados disponibles en el mercado peruano lo antes posible”, explica.

Además de la solución oral Yellow Oil, Mariz comenta que están en proceso el registro de Spectrum Blue, que contiene cantidades equilibradas de Tetrahidrocannabinol (THC, componente psicoactivo del cannabis) y CBD, y Spectrum Red, producto predominantemente de THC.

Según la Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas (Digemid), en la actualidad Canopy Growth Perú S.A.C. tiene tres solicitudes en proceso: el Yellow Softgel (cápsulas blandas con extracto de cannabis sativa, cuyo trámite inició en abril), Blue Softgel (cápsulas blandas con THC y CBD) y Blue Oil (solución oral con THC y CBD), ambas con solicitudes ingresadas a fines de mayo.

“El plan es llegar a las cadenas de farmacias de la misma forma que los medicamentos comunes. Vamos a seguir estructurando el negocio de la mejor manera posible y siempre bajo los reglamentos de Digemid”, precisa.

De otro lado, en cuanto a educación médica, en alianza con la Universidad Peruana Cayetano Heredia (UPCH), Canopy Growth promovió este año el primer posgrado de medicina cannabinoide del país y ha capacitado a 240 médicos. La compañía planea realizar una segunda etapa durante el 2020.

Además, Spectrum Therapeutics ha lanzado un curso global denominado Spectrum Academy, exclusivo para los médicos que desean profundizar sus conocimientos sobre los usos terapéuticos del cannabis medicinal en el tratamiento del dolor crónico. El curso, que originalmente se imparte de manera presencial en la sede canadiense de la empresa, tiene ahora una versión digital gratuita. Entre los expositores se encuentra Rodrigo Diez, doctor en dolor y el primer peruano en ser certificado por el Instituto Mundial del Dolor. Su sesión se dictará el 29 de julio.

Sobre la posibilidad del negocio de cannabis recreativo en Perú, Mariz dijo: “Hoy está enfocado en Canadá, pues dicho país cuenta con una regulación nacional para el uso adulto. Es una discusión muy específica de cada país y sociedad que podría avanzar o no”.

Regulación

Wanderley Mariz considera que una de las fortalezas de la normativa peruana para el cannabis medicinal es que está orientada a los pacientes, a diferencia de, por ejemplo, Colombia, cuyo marco es más restrictivo en este punto y tiene el foco en la producción para la exportación.

“En el Perú es más fácil que los pacientes puedan acceder porque los reglamentos publicados el año pasado aclararon las condiciones de registro para productos específicos derivados de cannabis”, señala.

Entre las particularidades de la norma peruana esta la categoría de producto natural para uso en salud, que no tiene la exigencia de establecer indicaciones médicas específicas, lo que a la vez da libertad a los médicos para recetar estos productos según el uso que consideren necesario.

Según Canopy Growth, en el Perú se estima que existen 1.5 millones de personas que sufren de afecciones que podrían ser tratadas con cannabis medicinal. Hasta el momento, hay más de 6,500 pacientes registrados en el Registro Nacional de Pacientes Usuarios de Cannabis, de acuerdo con el último Update de cannabis medicinal en el Perú, de Rodrigo, Elías y Medrano Abogados.

Industria

La marihuana y el cáñamo provienen de la familia “Cannabis sativa”. El reglamento peruano establece que el cáñamo o hemp es la planta de cannabis cuyo contenido de THC (componente psicoactivo) es inferior al 1%. En Estados Unidos, dicho umbral está por debajo del 0.3%.

De la planta de cáñamo o hemp, comenta Mariz, se pueden extraer aceites, pero también fibras. “Es una planta más grande que la de cannabis tradicional. Se puede cultivar con menos espacio entre una y otra y aplicar procesos de agricultura mecanizada”.

“Considero que esta es una gran oportunidad para el Perú y podría dar un paso más para regular el cultivo y el mercado interno para productos de cáñamo industrial”, afirma Mariz.

Dentro del segmento de cannabis industrial, Canopy Growth cuenta con una línea de bebibles, comestibles y de suplementos alimenticios elaborados con CBD que por ahora solo se comercializan en Canadá. “Veo potencial para estos productos en el Perú. Se trata de un mercado de 18 millones de personas, con una tradición agrícola y gastronómica, que ya avanzó en el acceso para el uso medicinal”, indica.

Si bien la empresa no ha anunciado planes para este segmento en el Perú —más allá de su interés en el mercado— y no existe un marco legal que lo permita aún, según el Indecopi, Canopy Growth Corporation cuenta con dos registros de diseño industrial para vaporizadores y seis de patentes de invención, que incluyen diversas composiciones de cannabinoides, entre los que se encuentra uno de cannabinoides comestibles.