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Los problemas internos que afrontan los países de la región generan incertidumbre en varios sectores y crean una oportunidad para que las aseguradoras ofrezcan productos de protección a las empresas.
“Evidentemente, en Latinoamérica existe una coyuntura política muy compleja y los clientes permanentemente están preguntando cómo van a responder las pólizas que existen en los distintos mercados frente a este tipo de eventos”, indicó a Gestión Andrew Perry, CEO de Lockton Latinoamérica & el Caribe.
Preocupación
El escenario político y eventos de sabotaje, huelgas, conflictos sociales y una eventual Asamblea Constituyente observados en Perú, provocan un ambiente de preocupación en las compañías que se ha acentuado últimamente, dijo.
En este escenario, sostuvo que más empresas buscan protegerse del riesgo político local y solicitan asesoría de sus corredores de seguro en busca de pólizas más robustas que se adecúen a sus necesidades.
Dicho seguro cubre riesgos de eventos políticos, incluidas las acciones directas e indirectas de los gobiernos que influyen en las empresas y que tienen impacto negativo sobre las inversiones; embargos comerciales y expropiaciones que podrían afectar su negocio y resultados.
Además, este producto también sirve como protección para accionistas, acreedores y otros socios financieros contra pérdidas imprevistas.
Incertidumbre global
Según Perry, esta búsqueda de cobertura también aumentó por la incertidumbre ante el panorama global.
“Las firmas quieren refugio frente a riesgos, como los recientes problemas en la cadena de suministro o el conflicto armado entre Rusia y Ucrania”, añadió.
“El cliente latinoamericano es cada vez más maduro en su forma de comprar y usar el seguro adquirido; no solo está mirando riesgos en su país, sino que observa hacia el mundo y el impacto que tendrán estos en cada economía”, enfatizó.
Falta de capacidad
En la región, en general, lo que más están demandando son seguros para riesgos catastróficos, como erupciones volcánicas o terremotos, aunque se percibe una falta de capacidad de respuesta en algunas partes de la región como Perú, Chile y el Caribe, precisó. Asimismo, las empresas consideran importantes los riesgos tecnológicos, como ciberataques, cuya amenaza es constante, y la cobertura de directores y ejecutivos, agregó
El ejecutivo detalló que, en el país, Lockton se concentra en grandes riesgos de carácter complejo como los que se ciernen sobre los sectores minero, energético, hidrocarburos, agrícola, construcción y consultoría de riesgos humanos.
Empresas
“En Perú, estamos asesorando a empresas líderes en generación eléctrica, mineras, entidades financieras, importadores y distribuidores de autos, empresas de transporte, operadores logísticos, petroleras, empresas de consumo masivo y líderes de auditoría”, dijo. Resaltó la contratación de un equipo especializado en data analytics, como parte de su objetivo de desarrollar una red de servicios de consultoría que ayude a las empresas en su estrategia de transferencia de riesgos.
Mercado de corredores local con pocos competidores
Perú es el primer país latinoamericano por el que Lockton decidió apostar en su etapa de expansión en la región, pese a la complicada coyuntura política que atravesaba el mercado local hace un año, cuando empezó operaciones, comentó Andrew Perry.
La inversión es de largo plazo y, con un objetivo conservador, planea alcanzar los S/ 20 millones de ingresos en cinco años, enfocándose en el mercado corporativo y atendiendo sectores de riesgo elevado, expresó.
Según el ejecutivo, el mercado de corretaje nacional posee muy pocos competidores, tras las compras y fusiones entre los actores más grandes del sector, lo que ocasiona una oferta muy restringida para el cliente.
