Esta decisión implica un mayor control de United sobre Avianca con base en el préstamo de US$ 456 millones que la compañía estadounidense hizo en noviembre pasado a una empresa del grupo Sinergy, accionista mayoritario de Avianca Holdings, y en la cual se dieron como garantía las acciones de éste en la aerolínea colombiana.
Esta decisión implica un mayor control de United sobre Avianca con base en el préstamo de US$ 456 millones que la compañía estadounidense hizo en noviembre pasado a una empresa del grupo Sinergy, accionista mayoritario de Avianca Holdings, y en la cual se dieron como garantía las acciones de éste en la aerolínea colombiana.

Avianca Holdings vendió su participación en las aerolíneas centroamericanas Sansa en Costa Rica y La Costeña en Nicaragua, como parte de un plan de reestructuración y desinversión de activos no estratégicos, informó el martes la empresa aérea.

El comprador es la sociedad Regional Airlines Holding LLC, domiciliada en Delaware, Estados Unidos, que pagó alrededor de US$ 15.5 millones. Las dos aerolíneas operan vuelos domésticos en Costa Rica y Nicaragua, respectivamente.

Con esta transacción, 13 Cessna 208 y dos ATR 42 dejarán de hacer parte de la flota de Avianca Holdings, continuando con la estrategia de simplificación de la flota, según la compañía.

"Esta transacción se da en el marco de la nueva estrategia corporativa del Holding que busca fortalecer su segmento de transporte internacional de pasajeros", dijo un comunicado de Avianca Holding.

La aerolínea aclaró que sus rutas internacionales desde Nicaragua y Costa Rica no sufrirán ninguna afectación.

Synergy Group Corp, del empresario Germán Efromovich, perdió en mayo el control de Avianca Holdings tras incumplir un acuerdo de cobertura por un préstamo a la estadounidense United Airlines, que entregó la administración de la aerolínea insignia de Colombia al socio minoritario Kingsland.

Avianca Holdings cerró en marzo un acuerdo con Airbus para aplazar la incorporación de 35 aviones A320neo y cancelar la compra de otras 17 aeronaves de un pedido inicial de 128, lo que le permitirá reducir compromisos financieros por US$ 2,600 millones y mejorar su flujo de caja.

La aerolínea está inmersa en un plan de transformación que busca la optimización de recursos con iniciativas como la desinversión de activos no estratégicos y la simplificación de su flota para mejorar la rentabilidad.