El gigante del comercio electrónico y la tecnología Amazon anunció este martes un beneficio de US$ 10,431 millones en el primer trimestre de 2024, más del triple respecto al mismo tramo del año previo.
La multinacional dirigida por Andy Jassy tuvo una facturación neta de 143,313 millones en los tres primeros meses del ejercicio, un 12% superior a su nivel interanual, y más de la mitad se recaudó en Norteamérica, su mejor mercado, según informó en un comunicado.
Jassy, consejero delegado y presidente de Amazon, destacó que el avance de la Inteligencia Artificial (IA) y la apuesta de las empresas por la modernización de sus infraestructuras están “reacelerando” al crecimiento de Amazon Web Services (AWS), su servicio de la nube.
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El ascenso que, según los analistas, se estaba ralentizando ante el aumento de competencia y el recorte de gasto de las empresas, ha sido del 17% interanual en el trimestre, hasta US$ 25,000 millones en ingresos, indica el desglose.
Amazon, una de las mayores tecnológicas de EE.UU., y que se ha subido a la ola de la innovación en IA liderada por Microsoft relativamente tarde, cuenta con su propio asistente de IA generativa, Amazon Q, y está incorporando esta herramienta en su negocio.
Jassy dijo que las capacidades de IA han contribuido a que el segmento de AWS alcance una facturación anual de US$ 100,000 millones.
En los resultados también destacó el fuerte crecimiento de los servicios publicitarios, del 24% interanual, hasta 11,824 millones, que el máximo ejecutivo atribuyó a la buena marcha de las tiendas físicas y de su plataforma de ‘streaming’ Prime Video.
Amazon indicó que sigue anotando cargos que menguan sus cifras, esta vez de US$ 2,000 millones, por su inversión en la empresa de automóviles eléctricos Rivian.
Para el segundo trimestre, la multinacional espera un crecimiento en su facturación neta de entre el 7 y el 11% interanual, cifras que no convencieron a los analistas, que señalan que sigue afectada por la reducción del gasto en sus servicios en la nube.
El informe, publicado al cierre de Wall Street, tuvo una buena acogida inicial y las acciones subían un 2,5 % en las operaciones electrónicas. En la sesión, perdió un 3.3%.