La demanda mundial de tráfico aéreo se desplomó un 14% en febrero, el mayor descenso desde el atentado terrorista del 11 de septiembre, debido a que las aerolíneas fueron “golpeadas por un mazo llamado Covid-19”, dijo la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA, del inglés).
La disminución refleja un colapso récord en los viajes en China ese mes y una caída del 41% en la demanda en la región de Asia-Pacífico, dijo IATA, advirtiendo que la situación se ha agravado.
“Esta es la mayor crisis a la que el sector se haya enfrentado”, dijo el director general de IATA, Alexandre de Juniac, en un comunicado. “El impacto en la aviación ha dejado a las aerolíneas con pocas opciones, excepto recortar costes y tomar medidas de emergencia en un intento por sobrevivir a estas circunstancias extraordinarias”.
“Esta es la hora más oscura de la aviación y es difícil ver un amanecer en el futuro”. Juniac, de IATA
IATA, que representa a unos 290 operadores, dijo el mes pasado que las aerolíneas de todo el mundo podrían dejar de ingresar US$ 252,000 millones este año y consumir un capital de hasta US$ 61,000 millones en el segundo trimestre a medida que los viajes se desploman. Los casos confirmados de coronavirus en todo el mundo han alcanzado 1 millón y 53,000 muertes.
El impacto total de la pandemia no se conocerá hasta los resultados de marzo, ya que muchos países solo comenzaron a limitar los viajes el mes pasado. Las aerolíneas en Estados Unidos, por ejemplo, registraron un sólido desempeño en febrero ya que el tráfico nacional aumentó un 10%, aunque la demanda comenzó a caer hacia el final, dijo IATA.
El tráfico nacional en China cayó un 84% en febrero, la peor cifra desde que IATA comenzó a hacer un seguimiento del mercado en el 2000, pero ahora muestra señales de mejora.
IATA ha estado presionando para recibir rescates de los Gobiernos ya que muchas aerolíneas se están quedando sin liquidez debido a que las ventas se han desplomado pero los costos fijos continúan. “Sin medidas adicionales de los Gobiernos hoy, la industria no estará en condiciones de ayudar cuando los cielos reluzcan mañana”, dijo de Juniac.
Además de las aerolíneas, Boeing Co. espera que miles de trabajadores se retiren o acepten una oferta de despido voluntario a medida que el fabricante de aviones con sede en Chicago se apresura a reducir sus operaciones. Por su parte, Airbus SE está ampliando las líneas de crédito y ha cancelado su dividendo.