Las acciones de Grupo Televisa treparon este miércoles a niveles no vistos en casi dos años y medio después de que el gigante de medios mexicano anunció que fusionará parte de su negocio de contenidos con su socia estadounidense Univision para crear una empresa que competiría en español con Netflix.
La nueva compañía, llamada Televisa-Univision, contará con contenido de ambas firmas, incluyendo series, películas, deportes y telenovelas. También planea lanzar un servicio de transmisión streaming a inicios del 2022.
Tras la noticia, las acciones de Televisa, el mayor productor mundial de contenidos audiovisuales en español, llegaron a dispararse un 32.7% en la bolsa de México a 53.96 pesos, su mayor nivel desde diciembre del 2018, para luego recortar ganancias.
“Consideramos que la noticia resulta positiva para Televisa, ya que implica la generación de sinergias”, dijeron analistas del grupo financiero Monex.
Al cierre de los negocios, los títulos subieron 22.85%.
Ejecutivos de Televisa y Univision, el conglomerado de medios en español más grande de Estados Unidos, expresaron su confianza en la capacidad del nuevo coloso de contenidos para captar una población de habla hispana que ha estado “desatendida”.
El presidente ejecutivo de Univision, Wade Davis, quien también dirigirá Televisa-Univision, dijo que los enormes acervos de contenido de ambas compañías impulsarán el crecimiento del servicio de transmisión.
“Creemos que el mercado de servicios de streaming en el principal mercado en español tiene un valor de miles de millones de dólares y seguirá creciendo”, aseveró.
La nueva firma generará US$ 2,000 millones de valor de capital el primer día, aseguró el copresidente ejecutivo de Televisa, Alfonso de Angoitia. Además, se espera que genere hasta US$ 5,500 millones de flujo de efectivo libre de deuda en los próximos años, agregó Davis.
El plan de Televisa-Univision fue aclamado por el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, quien dedicó el inicio de su conferencia de prensa diaria a subrayar el potencial de la fusión.
Televisa opera varios canales de televisión, un sistema de cable e internet y negocios de entretenimiento, pero desde hace años se encuentra bajo presión a medida que los espectadores migran desde los servicios tradicionales de transmisión a opciones en línea.
Sus finanzas también han resentido el golpe de fuertes recortes en el gasto de los anunciantes.