La inflación anual en el Perú llegó a 8.09%, la tasa más alta registrada en el país en 24 años, cuando en mayo de 1998 fue de 8.25%.
La principal razón de este resultado es el incremento de precios de los alimentos y la energía (los combustibles para ser más precisos), cuya variación anual en mayo fue de 12.71%, aunque ligeramente menor que el 12.98% alcanzado en abril.
Pero el efecto de estos incrementos no solo se queda en sus productos, sino que están teniendo un efecto de “contagio” a otros bienes y servicios que se ofrecen en el país.
Esto se observa en el indicador denominado “inflación sin alimentos ni energía”, que excluye a estos productos por su volatilidad y refleja la variación de precios del resto de bienes y servicios de la economía.
Son estos precios los que también vienen con una tendencia creciente durante el año. Así, se pasó de un incremento anual de 3.08% en enero a 4.26% en mayo, con subidas consecutivas todos los meses, ubicándose por encima de límite superior del rango meta del Banco Central de Reserva (BCR), que es de 3%.
Efecto de contagio
El economista jefe del BBVA Research, Hugo Perea, explicó que la inflación sin alimentos ni energía, limpia los choques de oferta que tienen estos productos y hace que se queden el resto de bienes y servicios, que responden más a factores de demanda.
“En un entorno donde no estamos viendo una economía sobrecalentada que impulse la demanda de bienes, el incremento de esta inflación se explica por una contaminación de los alimentos y energía hacia otros bienes”, afirmó.
Uno de los sectores donde más se siente este contagio de precios es en el sector transportes, donde por el incremento de los combustibles, las tarifas de la movilidad se incrementan, lo que a su vez impacta en la forma en que las empresas movilizan sus productos, trasladando el costos a los consumidores.
Precisamente, el sector transporte es el que más influyó en la inflación de mayo, pues se observó un incremento de las tarifas de ómnibus y microbús en 3.9% a nivel nacional, mientras que en Lima el alza fue similar por alza en las tarifas de pasajes en los corredores complementarios y otras empresas de transporte. Incluso subió el pasaje aéreo internacional en 1.8%.
Impacto de expectativas
El jefe del Sistema de Información de Macroconsult, Eduardo Jiménez, explicó que otra de las razones para el alza de los productos que no son ni alimentos ni energía, tiene que ver con la subida de las expectativas de inflación.
“Cuando asumes que la inflación es permanente y va a durar bastante más tiempo, comienzas a hacer tus ajustes de precios porque ya afectas tu margen”, dijo.
Dijo los restaurantes también es otro de los sectores que han ido moviendo sus precios al alza, aunque de manera más lenta.
Además, advirtió que es probable que estas decisiones se trasladen al sector servicios, recreación y cultura, entre otros.
Competencia es la que evita mayores alzas de precios
El jefe del Sistema de Información de Macroconsult, Eduardo Jiménez, afirmó que es la competencia la que evita un mayor incremento de precios en diversos sectores.
Puso como ejemplo el tema de las tasas de interés, que si bien están subiendo por las alzas consecutivas de la tasa de referencia del BCR, en los créditos vehiculares no han tenido variación, porque ese segmento específico tiene mucha competencia y ninguna entidad se atreve a subir porque pierde clientes.
Esto se da en un entorno en que los precios de los vehículos se ha ido incrementando en el último año.
Mencionó que otro sector donde la competencia evita un alza mayor de los precios es el de restaurantes, pues por la cantidad que existen la variación que hacen es más lenta para mantenerse en el mercado.
El economista mencionó que la inflación en el Perú es básicamente por oferta, es decir, insumos que suben fuertemente sus precios y presionan al resto de productos. Hay muy poca inflación por demanda en el Perú.
La inflación volverá a la meta el 2023
El Banco Central de Reserva (BCR) afirmó que se proyecta que la inflación retornaría al rango meta, de entre 1% y 3% de inflación, entre el segundo y tercer trimestre del próximo año.
Refirió que la trayectoria decreciente de la inflación interanual se iniciaría en julio del presente año, debido al inicio de la reversión del efecto de diversos factores sobre la tasa de inflación y sus expectativas (tipo de cambio, precios internacionales de combustibles y granos) y a que la actividad económica se ubicará aún por debajo de su nivel potencial.
Depende de estos resultados que el BCR siga subiendo su tasa de interés de referencia.