(Foto: Shutterstock)
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Élida Vega Córdova

elida.vega@comercio.com.pe

En el 2014, el edificio residencial Osa Mayor, construido por Madrid Ingenieros en el distrito limeño Surco, se convirtió en el primer edificio de viviendas en obtener la certificación LEED en el , al lograr una reducción de 25% en el consumo de energía en sus áreas comunes y ahorrar un 40% en el consumo de agua.

Desde entonces, los o edificios verdes han empezado a ganar terreno en el . Ya son más de 280 edificaciones que cuentan con una de las tres las certificaciones internacionales que tienen presencia en el país: LEED, EDGE y Breeam, todas enfocadas en garantizar que los proyectos hayan sido desarrollados siguiendo estándares y lineamientos internacionales de sostenibilidad.

Certificación LEED

Otorgada por el Consejo de Construcción Sostenible de los Estados Unidos (US Green Building Council – USGBC), LEED (liderazgo en energía y diseño medioambiental, en español) es el sistema de certificación de edificios sostenibles más usado en el mundo y en el Perú, en donde más de 200 proyectos ya cuentan con esta certificación.

Según la USGBC, esta certificación permite que el diseño, construcción, operación y mantenimiento de un edificio o de un desarrollo urbano sea más eficiente en el uso de recursos.

Para V&V Grupo Inmobiliario, cuyo proyecto Grimaldo 430 en el distrito limeño de Miraflores cuenta con el LEED, esta certificación premia el uso de estrategias sostenibles en todos los procesos de construcción del proyecto inmobiliario: uso de materiales, manejo de agua, control de energía y creación de ambientes ecoamigables.

En ese sentido, contribuye con un aumento del valor del edificio en el mercado porque “se estima que cumplir con los estándares LEED genera ahorros de 30% a 70% en consumo de energía, de 30% a 50% en consumo de agua y reduce hasta en 90% los residuos de los departamentos”.

Pero no sería lo único pues los edificios residenciales con certificación LEED consumen, en promedio, 25% menos energía y 7% menos agua que otros proyectos, minimizando también las emisiones de CO2 en un 34%, aproximadamente. “Todo esto se traduce en ahorro monetario y un estilo de vida cada vez más verde, lo que le da un valor agregado a la propiedad”, aseguran en V&V.

Certificación EDGE

Creada por el IFC –miembro del Grupo del Banco Mundial– para hacer frente a los desafíos que enfrentan los mercados emergentes alrededor del mundo. La certificación Excelencia en Diseño para Mayores Eficiencias (EDGE, por sus siglas en inglés), como ellos mismos lo describen, permite al mercado inmobiliario peruano construir edificios verdes (comerciales y residenciales) de manera sostenible.

Green Business Certification Inc. (GBCI) y Sintali-SGS son los proveedores de servicios de certificación EDGE en el Perú y pueden certificar un proyecto desde la etapa de diseño.

Tal como señala EDGE, en el Perú esta certificación es una oportunidad para el gobierno, desarrolladores, bancos y compradores que gastan hasta el 17% de sus ingresos familiares en electricidad. Por esa razón, los compradores de viviendas exigirán soluciones energéticamente eficientes para compensar los altos recibos de servicios públicos.

Actualmente, son cerca de 80 las construcciones que ya han recibido la certificación EDGE, entre ellas 70 inmuebles residenciales, siete oficinas y una entidad educativa. Entre las firmas que ya han certificado sus edificaciones figuran Madrid Ingenieros, Latam Logistic Properties (LLP), Senati y DepoSeguro.

Certificación BREEAM

Por último, la Metodología de Evaluación Ambiental e Investigación de Edificios (BREEAM, en inglés) es el más reciente método de evaluación y certificación de sostenibilidad para proyectos de construcción en el país.

Al igual que LEED y EDGE, esta certificación también favorece las construcciones sostenibles que se traducen en una mayor rentabilidad para quien construye, opera o mantiene el edificio, además de reducir su impacto en el medioambiente y brindar un mayor confort y salud a sus residentes.

Desde BREEAM Perú sostienen que “las construcciones sostenibles repercuten en beneficios económicos, ambientales y sociales para todas las personas vinculadas a la vida de un edificio”.