La agencia Moody’s Investors Service decidió ayer cambiar de estable a negativa la perspectiva de la calificación crediticia de Perú, actualmente en A3 para emisor a largo plazo en moneda extranjera y local.
Al respecto, los analistas coincidieron en que si bien por ahora el impacto sería “marginal”, podría iniciar una tendencia al alza en el costo del financiamiento no solo para el Gobierno, sino también para las empresas y personas, lo cual luego sería más notorio en caso Moody’s decida rebajar la calificación crediticia de Perú.
“Por ahora el impacto es marginal, pero si la calificación desciende, el costo del financiamiento va a subir y también el acceso al mercado de capitales se va a dificultar”, señaló el exministro de Economía, Alonso Segura.
El economista subrayó que el cambio de perspectiva es un claro mensaje para Perú. “Lo que te está diciendo Moody’s es que en los próximos doce meses es más probable que sí haya una rebaja de calificación”, anotó.
No obstante, para el economista Elmer Cuba, socio de Macroconsult, la decisión tomada ayer por la agencia resulta “prematura”, ya que pudo esperar a los resultados de la segunda vuelta electoral y a conocer qué medidas económicas tomará el próximo gobierno.
“La decisión (de ayer) me parece cuestionable. Las cuentas de Perú siguen muy sólidas, se espera una mejora en la recaudación del IGV y renta, más aún con los altos precios del cobre, por lo que en lo fiscal en el corto plazo no habría problema”, refirió Cuba.
Cabe anotar que Moody’s es la segunda de las tres principales agencias de calificación crediticia que cambia la perspectiva de Perú a negativa, luego de que diciembre pasado hiciera lo mismo Fitch. Solo Standard & Poor’s mantiene en estable la perspectiva de Perú. En los tres casos Perú se ubica dentro del grado de inversión.
Expectativa por nuevo Gobierno
Los analistas coincidieron en que la decisión de rebajar o no la calificación crediticia de Perú dependerá de los primeros pasos que de el próximo presidente, tras los resultados de las elecciones de junio.
Segura aclara que no es inevitable una rebaja en la calificación crediticia, sino que ello dependerá del comportamiento que tenga el próximo Congreso y Ejecutivo.
“El cambio en la calificación crediticia dependerá sobre todo del ganador de las elecciones y de lo que proponga”, refirió.
En ello coincidió Cuba. Y la evaluación será de inmediato, tras los resultados de las elecciones.
“Se evalúa todo; los primeros pasos son cruciales, el primer mensaje que de el ganador tras los resultados, a quiénes nombra para las comisiones de transferencia y el primer discurso de investidura será central”, anotó.
LEA TAMBIÉN: Moody’s cambia perspectiva de calificación A3 de Perú a negativa