Los planes de fusión entre el grupo automovilístico italoestadounidense Fiat Chrysler Automobiles (FCA) y la empresa francesa Peugeot Citroën (PSA) siguen adelante y no comportarán el cierre de fábricas, a pesar de las dificultades económicas derivadas de la crisis del coronavirus.
Así lo afirma el presidente de FCA, John Elkann, en una carta enviada a los accionistas de Exor, la sociedad de cartera de la familia Agnelli, a la que ha tenido acceso EFE.
“Estamos convencidos de poder lograr las sinergias esperadas de alrededor de 3,700 millones de euros al año sin cerrar fábricas, gracias a la creación de una nueva compañía, especialmente teniendo en cuenta que estará dirigida por Carlos Tavares, quien logró resultados sólidos como consejero delegado de PSA”, sostiene.
“La nueva compañía tendrá los recursos y el tamaño necesarios para estar a la vanguardia de esta nueva era de movilidad sostenible”, añade.
El año pasado, Fiat Chrysler y PSA -fabricante de Peugeot, Citroën y Opel- confirmaron que planeaban una fusión para crear la cuarta compañía automovilística del mundo con sinergias estimadas en 3,700 millones de euros.
Antes de que concluya esta operación, FCA se ha comprometido a distribuir a sus accionistas un dividendo por un valor de 5,500 millones de euros para igualar las valoraciones de los dos grupos, mientras que la sociedad francesa venderá su participación del 46% en la proveedora automovilística Faurecia.
La crisis del coronavirus ha penalizado a las bolsas mundiales por la incertidumbre de los inversores sobre los efectos negativos en las economías y FCA ha perdido un 34.13% en la Bolsa de Milán en los últimos seis meses y un 29.67% solo en el último mes.
Algunos expertos en Italia se preguntan si el grupo podrá entregar este dividendo. Por el momento FCA ha anunciado que pospone su junta de accionistas del 16 de abril a finales de junio y en ella abordará esta cuestión.
En la carta enviada a los accionistas de Exor, Elkann reconoce la difícil situación que atraviesa el tejido empresarial con la pandemia del coronavirus y concretamente las empresas del grupo FCA, Ferrari y CNH Industrial, que han tenido que suspender temporalmente su producción en Europa y en Estados Unidos.
Sin embargo, matiza que "el espíritu y la determinación" de los trabajadores permitirán a estas compañías "regresar más fuertes cuando todo esto termine".
Celebra que las medidas de confinamiento adoptadas en Italia están dando resultados porque se está controlando el virus, destaca que la salud de las personas es prioritaria y afirma que el grupo seguirá ayudando a la sociedad en la medida de sus posibilidades a la vez que planifica futuros proyectos.
En Italia, FCA y Ferrari están contribuyendo a la construcción de respiradores para hospitales tan necesarios para los enfermos en cuidados intensivos, en colaboración con la empresa líder en sistemas de respiración italiana Siare Engineering Internacional.