La Bolsa de Valores de Lima (BVL) cierra el año en azul tras la reapertura económica y el proceso electoral.
El Índice General de la plaza local subió 1.44% ayer, con lo que culminaría el año con una ganancia acumulada de 1.6%, según datos de la BVL.
El ruido político local en el 2021 evitó que la bolsa local logre un mayor rendimiento, turbulencia que podría continuar el año entrante aunque con menor relevancia, salvo que ocurra un proceso de vacancia, se cierre el Congreso o se redacte una nueva Constitución, indicó a Gestión Marco Contreras, head of research de Kallpa SAB.
Utilidades
Pese a este escenario de incertidumbre política, el índice referente de la plaza limeña podría rebotar entre 5% y 10% en el 2022, alza que se alinearía a las mayores utilidades que generarían las empresas que cotizan en bolsa, sostuvo.
Incluso Credicorp Capital estima que la BVL podría subir hasta 15% en los siguientes 12 meses, en la medida en que el ruido político, regulatorio e impositivo esté controlado, mejore la relación entre el Ejecutivo y Congreso, y haya un manejo adecuado de posibles conflictos sociales.
“Podríamos ver avances importantes en minería, considerando altos niveles de precios de metales y puesta en marcha de nuevos proyectos; así como en bancos, considerando la expectativa de crecimiento de la cartera, con niveles de morosidad controlados, y en eléctricas, por la expectativa de un mayor dinamismo de la demanda”, mencionó la casa de bolsa.
Construcción
Las acciones que más ganaron este año fueron las de construcción (35.5%) e industriales (35%), seguidas por las mineras (5.82%) y de consumo (4.81%). En contraste, las más perjudicadas fueron las de entidades financieras, que retrocedieron 12.26%.
En el 2022, en un escenario de mayor incertidumbre e inestabilidad, las acciones de empresas de demanda interna podrían retroceder y las de mineras reaccionarían adversamente a un mayor riesgo para ese sector, con lo que la bolsa podría perder 10%, prevé Contreras.
Estancamiento
Este 2021 sería el tercer año consecutivo en que la bolsa sube, aunque en el 2020 también avanzó apenas 1.49%.
“Se observa una especie de estancamiento con bastante volatilidad; alguien que mantuvo su dinero en la bolsa no ganó ni perdió por los vaivenes políticos”, dijo Sebastián Cruz, analista sénior de Seminario SAB.
Los precios de los metales, que favorecieron a las compañías mineras, fueron un soporte para la bolsa; y las cementeras se fortalecieron, aunque los riesgos continuaron y redujeron la confianza de los inversionistas, manifestó.
China
Los especialistas consideran que, además del ruido político, la aparición de nuevas variantes de covid, la política monetaria de la Fed de EE.UU. frente a una elevada inflación y la magnitud de crecimiento de China influirán en la plaza local el año venidero.
Se encarece deuda del Gobierno
El incremento de tasas a nivel global encareció el costo de la deuda peruana, aumento que se acentuó con el ruido político local, dijo Carlos Palma, gerente de renta fija de Renta4 SAB.
Así, el bono del Tesoro peruano con vencimiento en 10 años registró un alza en la tasa de interés de 3.51% a 5.88% en el año, al tiempo que su precio decayó. El ejecutivo estima que la volatilidad será menor en el 2022 y habría una mayor demanda por estos papeles, por lo que su tasa bajaría a 5%.
Las AFP buscarían recuperar su participación en bonos soberanos locales tras quedarse con niveles mínimos en sus portafolios para atender los retiros de afiliados, mientras que se observa una recomposición de cartera en Latinoamérica que implica un flujo de inversión hacia títulos peruanos, expresó.
En corto
Plazas extranjeras. Los índices de la bolsa de Nueva York reportaron elevadas ganancias en el año. El S&P 500 subió 27.2%, mientras que el Nasdaq, 27.47%, y el Dow Jones, 18.9%.
Por su lado, las bolsas de México y Chile avanzaron 19.48% y 3.14% en este periodo. En contraste, las plazas de Sao Paulo y Bogotá acumularon pérdidas de 11.93% y 1.87%, respectivamente, en el 2021.