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Los cultivos peruanos de caña de azúcar gozan de la mayor productividad en América Latina: el rendimiento promedio de una hectárea en el país es de 115 toneladas de caña y algunas pueden llegar a rendir la cifra récord de 180. En tanto, los cultivos de Brasil, un importante exportador de este commodity, rinden solo 77 toneladas por hectárea, según la Asociación Peruana de Agroindustriales del Azúcar y Derivados (Perucaña).
A diferencia de otros países de Latinoamérica, el Perú goza en el norte del país de un clima que le permite cosechar caña de azúcar durante todo el año, y no solo por temporadas, explica Carlos Castro, gerente general de la asociación que representa a ocho de los más importantes ingenios azucareros del país: Casa Grande, San Jacinto, Agroaurora, Cartavio, Agrolmos, Caña Brava, Sol de Laredo y Paramonga.
Innovaciones
Asimismo, esta productividad va en aumento debido a las inversiones en tecnología que los ingenios están en efectuando para elevar su eficiencia en las distintas etapas del proceso de producción de azúcar, etanol y otros derivados.
El riego es uno de los aspectos en que los ingenios más están trabajando para incrementar los volúmenes de caña obtenidos por hectárea, como la implementación de sistemas de automatización y mejoras de procesos, optimizando los campos e introduciendo cambios en las variedades de los cultivos.
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Así, en el 2022 hubo una cosecha de caña ligeramente menor que en el 2021, debido a un clima de frío persistente; sin embargo, los volúmenes de azúcar obtenidos se mantuvieron en alrededor de 1.1 millones de toneladas debido a estas mejoras en la eficiencia de los ingenios.
Pero todavía es muy pronto para realizar proyecciones sobre la producción de este año, puesto que el rendimiento de los campos nuevamente dependerá en gran medida de los factores climatológicos. “Lo que sí sabemos es que el mal clima del año pasado también va a tener efectos en la cosecha de este año”, advierte Castro.
Según Perucaña, en el 2021 el rendimiento de los cultivos fue de 12 millones de toneladas, de las cuales el 79% se destinó a la producción de azúcar. Cabe recordar que el 40% de toda la caña de azúcar producida en el país se concentra en La Libertad, el departamento donde se ubican los ingenios Casa Grande, Cartavio y Laredo.
Asimismo, alrededor del 10% de la producción nacional de azúcar se destina a la exportación, principalmente a Estados Unidos y Colombia. Es preciso recordar que en julio de 2022, la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR) retiró a Nicaragua de la lista de 40 países que tienen una cuota anual de importación de azúcar, e incrementó la cuota de Perú, que ascendió a 1 117 195 toneladas de azúcar de caña sin refinar.
Por otro lado, Carlos Castro estimó que los precios del azúcar continuarían siendo altos debido a que los países productores están optando por destinar un mayor volumen de caña a la producción de etanol, que goza de gran demanda a raíz del alza de los precios de los combustibles por la invasión de Rusia a Ucrania, y debido a la disposición de la India a aceptar la mezcla de etanol con gasolina.
“El alza de precios ha beneficiado a los pequeños productores, pues las azucareras comparten este valor con ellos, que producen alrededor del 30% de la caña que se procesa”, manifestó.
