La Bolsa de Valores de Lima (BVL) ha sido favorecida por las consecuencias de la invasión de Rusia a Ucrania a través de precios altos de commodities como el oro y el cobre. Sin embargo, hay componentes que dependen de la demanda interna y del crecimiento del país, factores que podrían verse impactados por una postura más contractiva de la política monetaria para controlar la inflación y un entorno de propuestas radicales que restan claridad, señaló Jorge Ramos, presidente de la Asociacion de Sociedades Agentes de Bolsa (ASAB).
Indicó que lo ideal sería tener posición en distintos sectores de la economía peruana, además de minería, como el de banca, industria y consumo. Asimismo, recomendó también tener una posición a nivel global, a pesar de la caída de los activos de la bolsa estadounidense.
“Lo recomendable es tener el portafolio diversificado, pues los precios de los commodities no necesariamente se mantendrían altos. A nivel mundial se está viendo una contracción en la liquidez a través del aumento de tasas de referencia, y esto puede afectar la demanda de, por ejemplo el cobre, y con ello su precio”, señaló.
El también gerente general de BBVA Bolsa agregó que en la bolsa estadounidense las inversiones se pueden diversificar entre más sectores, pues se encuentran los tecnológicos y de consumo estacional.
Al respecto, César Romero, analista de Renta4 SAB, señaló que, a raíz del aumento de tasas de la Reserva Federal (Fed), el golpe ha sido más directo en el mercado de Estados Unidos, y que aún no hay claridad sobre cómo respondería a este recorte del estímulo monetario, que está sujeto a los niveles de inflación actual.
En ese sentido, indicó que sería recomendable, a pesar de las fuentes de riesgo local, tener mayor posición en acciones peruanas, aunque ello podría cambiar si hay un “tono” más relajado por parte de la Fed (su tasa está en un rango 0.75% y 1%, cuando hasta hace unos meses era de 0%).
“Si bien hay drivers en común entre Estados Unidos y Perú, en particular por los precios de los commodities, hay otros más importantes que impactan directamente como el aumento de las tasas de la Fed”, explicó.
Comentó que ello ha hecho que índices como el S&P500 y Nasdaq reaccionen negativamente con caídas bastante fuertes no vistas desde marzo del 2020.
“Considerando que el impacto del aumento de tasas es menor en Perú, podríamos estar un poco más en el país por el momento. A principios de año esperábamos más de Estados Unidos que Perú, pero ahora un poco más de este último”, apuntó.
Romero señaló que la recomendación está en los sectores de banca, industria, consumo y en menor medida minería, pues las acciones ya tienen un precio elevado.
“Dependiendo de los plazos, se puede hacer inversiones en entidades financieras que pueden aprovechar las mayores tasas en un mediano plazo o hacia finales del año. Asimismo, empresas de consumo, como Backus o InRetail, pueden beneficiarse a nivel local por los nuevos retiros de los fondos de las AFP”, subrayó.
Asimismo, consideró que hay acciones como las del sector energético que, a pesar de su alta volatilidad, pueden compensar caídas con el reparto de dividendos.
Con respecto al ruido político, manifestó que su impacto en la bolsa peruana dependerá de qué tan sólidos son los anuncios radicales; es decir, de la posibilidad y plazo en el que se puedan dar.
“El impacto de propuestas radicales como la asamblea constituyente están sujetas a las facilidades que se tengan para poder materializarlas. Por ejemplo, antes se hablaba de vacancia o cierre del Congreso, pero solo quedaron en suposiciones. Es un efecto más de corto plazo, como un susto. El mercado, por ejemplo, se vio impactado negativamente la semana antepasada por el anuncio del referéndum, pero en los siguientes días empezó a recuperarse nuevamente”, dijo.
Perspectivas
Romero señaló que, si bien las perspectivas fueron bastante buenas para la BVL al inicio del año, ahora en el corto y mediano plazo estarían sujetas a la contundencia de los drivers políticos.
“Vemos menos upsides durante el año que antes. Antes esperábamos un avance de entre 15% y 20% en el Índice General, pero ahora estimamos que sería menos”, concluyó.