El denominado “ruleteo” es una práctica en donde el cliente que ya tiene una deuda con su tarjeta de crédito busca endeudarse en otro banco para pagar el préstamo inicial.
Al respecto, el docente de la Facultad de Negocios de la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC), Jorge Ojeda, señaló a Gestión.pe que esta práctica riesgosa aparece cuando el usuario ya no tiene la capacidad para pagar la cuota mensual de cada tarjeta de crédito y busca como solución una nueva deuda en otra entidad bancaria.
“Cuando se tiene este problema (entrar al “ruleteo”) es porque el cliente ya no tiene liquidez. Las personas que llegan a este nivel es porque ya no les alcanza para pagar las deudas. Muchos sacan dinero de su tarjeta de crédito como dinero efectivo (disposición en efectivo) y ahí el costo es muy elevado. Lo peor es que lo único que se hace es seguir pagando intereses, es simplemente tomar un poco de aire”, sostuvo.
En ese sentido, indicó que el factor clave para salir de esta práctica es reducir el monto de la cuota mensual que actualmente tiene en todas sus deudas de la tarjeta de crédito.
¿Cómo? Para ello el tarjetahabiente debe solicitar a la entidad bancaria donde tiene su tarjeta de crédito una reprogramación de pago.
“Aquí no importa mucho el monto total de la deuda ni el plazo. Para aquella persona que ya está en el tema del ‘ruleteo’ lo mejor es tratar de reprogramar su deuda, pero con una cuota que pueda pagar con sus ingresos. Tal vez se demore un poco más de tiempo, pero terminará pagando”, sostuvo.
Otra alternativa, menciona, es solicitar una compra de deuda en una nueva entidad bancaria y con ello se consolida todas las deudas de la tarjeta de crédito.
Efecto colateral
El docente indica que optar por una reprogramación de deuda para reducir la deuda afectará su historial crediticio dentro del mismo banco donde tiene su tarjeta de crédito.
Sin embargo, aclara que no llegará a una central de riesgos pues en esta un cliente solo ingresa cuando enfrenta problemas de morosidad, es decir, cuando se retrasa los pagos en las fechas establecidas por la entidad o simplemente deja de pagar, mientras que los intereses siguen creciendo.
En el “ruleteo” el cliente sigue pagando sus cuotas, pero busca una solución endeudándose una vez más.
Así, Ojeda precisa que si reprograma sus pagos de su tarjeta de crédito, es claro que la entidad bancaria lo considerará como un comportamiento negativo, pero una vez solucionado el problema, mejorará su historial crediticio dentro del mismo banco.
Además, dijo que esta situación no será de conocimiento en otras entidades bancarias, solo del banco donde tiene el conflicto, precisa.
“Para el banco, a la interna, ahí habrá una modificación (en su historial crediticio), pero en las centrales de riesgo, mientras no aparezca morosidad no habrá problema. Además, esta modificación de historial no lo afectará en el sistema financiero en general, solo en el banco donde tiene la deuda. Si la persona se ordena en sus deudas y lo pagó, para el banco significa que la personal finalmente salió del problema financiero”, concluyó.