Los emprendedores se enfrentan a la decisión de acceder o no al financiamiento para crecer. Y es que, si bien el proceso de la venta puede funcionar bien: desde conseguir un buen proveedor, cerrar la venta a un cliente grande, hasta negociar la entrega; sin embargo, en algún momento les dicen que el pago llegará en 30 o 60 días.
¿Cómo sobrevivir todo ese tiempo?
“A la provisión que toma un emprendedor para sobrevivir desde el día en que vende un producto hasta que recibe el pago, se le llama ‘espalda financiera’. Casi ninguna empresa paga al contado y los pequeños empresarios requieren de capital de trabajo para evitar estar ‘apagando incendios’ o prestándose de varias fuentes a la vez”, afirma Aldo Saavedra, director de Negocios de Pequeña y Mediana Empresa de Equifax, dueña de Infocorp.
En esa línea, aclaró que el emprendedor que suele poner sus ahorros en su primer negocio también tiene la opción de financiar su capital de trabajo a través de las instituciones financieras, por lo que es importante tener un historial crediticio limpio y consultarlo periódicamente.
"Actualmente, existen 900 agentes Infocorp que proveen el reporte de crédito a los emprendedores de Lima. Muchas pymes suelen entrar en dificultades por salir a buscar fondos caros, mal y a destiempo", menciona Saavedra.
¿Qué recomendaciones debo tener en cuenta?
1. Ahorrar antes de iniciar. ¿Cómo se calcula el capital de trabajo? Si uno tiene un emprendimiento nuevo, o es su primera vez ofertando un producto, debe uno calcular cuál será su plazo promedio de cobro y los costos que tendrá en ese horizonte de tiempo. Muchas veces, la tentación es voltear a mirar la línea de crédito en la tarjeta o a un pariente por un préstamo. Lo recomendable es contar con ese capital desde que fundas la empresa y para eso se debe ahorrar.
2. Controlar riesgos. Una vez que se cuenta con espalda financiera, un emprendedor puede seguir escalando si se le presenta un negocio de alto retorno. En ese caso, el emprendedor debe buscar dónde está el riesgo, para controlarlo una vez que sea asumido. Pocas reglas en finanzas se cumplen, pero esta se cumple siempre: no hay grandes negocios que no tengan grandes riesgos.
3. Efecto ‘Titanic’: Un emprendedor debe tener un flujo de fondos para poder proyectar su empresa a mediano y largo plazo, es decir, no a uno o tres meses, sino a un año o dos. El emprendedor debe saber si se va a quedar sin plata en 10 meses, no en 10 minutos. Este es un signo de los negocios sostenibles, a diferencia del capitán del Titanic, quien pudo salvar el barco del naufragio si sabía del iceberg tres horas antes, no tres minutos antes.
4. Deudas planificadas. Según datos de Equifax, el comportamiento de pago de las startups peruanas (su score es de 526 puntos) es similar al de las micro y pequeñas empresas. Para no bajar de ese puntaje, puedes realizar un plan de compras prioritarias: qué necesitas primero y qué al final. No compres todo de golpe, sino conforme camina tu negocio. Ten en cuenta que los ingresos se tardan en llegar (y puede haber gastos imprevistos), por ello revisa tus prioridades de compra y sé puntual en tus pagos para construir un buen historial crediticio.
5. Gestiona tu deuda. Prioriza los aspectos de tu compañía que necesitan financiamiento. ¿Requieres más personal o más tecnología?, ¿no te alcanzó el presupuesto? Será importante conocer tu record crediticio a fin de conocer cómo te miran los bancos.
6. Bonus-track. Ten buenas prácticas para garantizar tus ingresos, estableciendo condiciones claras de precio y venta. Haz seguimiento constante de tu flujo de ingresos, asegurando que estás alineado con tu proyección original y así asegurar tu rentabilidad.