La última mitad del año tendrá mucha actividad en cuanto a shows musicales de artistas extranjeros que llegarán al Perú. Desde megaeventos, como el de Bad Bunny y Coldplay, pasando por conciertos medianos, como el de Andrés Calamaro, que visitará varias ciudades al interior del país, hasta los espectáculos de nicho, como el que hace poco brindó el trompetista Arturo Sandoval o más adelante Joan Manuel Serrat.
Jorge Fernández Vegas, productor general de Sinergia Creativa, analiza la oferta de entretenimiento y las preferencias del asistente de estos eventos.
Perfil del asistente
Para Fernández, la pandemia marcó un punto de quiebre en cuanto a la forma de pagar de los espectadores. “La mayoría de los peruanos, por encima del 90% o 95%, están comprando sus entradas con tarjeta”, comenta. El productor señala que antes del coronavirus, las personas que adquirían sus entradas con tarjeta eran aproximadamente el 75% del total, de los cuales el 35% o 40% lo hacía online. “En algún momento Teleticket llegó a tener más de 30 puntos de venta. Hoy solo tienen cinco o seis”.
Asimismo, Fernández dice que, si hablamos de conciertos internacionales, los rangos en promedio que el peruano paga son dos. Para los shows más económicos, el precio es de US$ 65 a US$ 70, mientras que al otro extremo están los espectáculos medianos y grandes, que pueden tener un valor promedio de US$ 110 a US$ 120. “Para estos últimos, se está usando bastante el ‘plástico’, sobre todo cuando hay incentivos como descuentos”, precisa.
Un consumidor más reflexivo
En cuanto al rubro de los conciertos, Fernández manifiesta que el hecho de que haya megaeventos con “sold out” no significa que a todos les esté yendo bien. “Efectivamente, hay un efecto rebote tras la pandemia, pero un gorrión no hace un verano. A pesar de la popularidad o la publicidad que tenga un concierto, existe ahora un público más reflexivo que piensa antes de invertir o gastar, según como lo vea, en entretenimiento”, explica. El productor los separa en dos tipos: los de 18 a 30 años y los de 30 a más. “La persona de 50 años piensa que tiene que pagar la universidad o la hipoteca. Es diferente al muchacho que todavía vive solo y que puede pagar con crédito esa entrada”, agrega. Además, Fernández opina que ante la amplia oferta que existe, el comprador debe descartar otras opciones de entretenimiento antes de elegir la correcta.
Conciertos de nicho
Fernández sostiene que como productora este año están trabajando conciertos de tamaño mediano y de nicho. Estos últimos suelen tener capacidad para 1,000 a 1,500 personas, aproximadamente.
El productor dibuja un perfil del asistente a un concierto internacional de nicho. En su opinión, este tiene entre 35 y 60 años, pertenece al NSE A y B, tiene un nivel de educación superior y en su mayoría son varones. “Está usualmente acostumbrado a asistir a locales cerrados con ciertas comodidades como estacionamiento o bebidas y comidas, si es que están disponibles”, detalla.
A diferencia del espectador de un concierto de salsa, que compra sus entradas cuando estas salen a la venta y en el último fin de semana (Gestión 27.05.2022), la adquisición de tickets por este cliente es más estable, de acuerdo con Fernández (ver cifra).
EN CORTO
Despedida. El cantautor español Joan Manuel Serrat se despide de los escenarios con una gira mundial que lo volverá a traer al Perú. La cita con el compositor de temas recordados como “Mediterráneo”, “Cantares” y “Aquellas pequeñas cosas” será el 16 de noviembre en el Plaza Arena del Jockey Club.
LA CIFRA
65%
DE LAS ENTRADAS se venden hasta una semana antes del día del evento en conciertos pequeños.