FOTO 1 | Lima posee más zonas arqueológicas precolombinas que cualquier otra ciudad de Sudamérica. Se estima que Perú cuenta con alrededor de 46.000 sitios precolombinos, de los cuales unos 400 se encuentran en la capital. Debido al crecimiento de la ciudad, estos sitios -conocidos como ´huacas´- están empezando a quedar acorralados en medio de la arquitectura moderna.
ciudadela

Lima posee más zonas arqueológicas precolombinas que cualquier otra ciudad de Sudamérica. Se estima que Perú cuenta con alrededor de 46,000 sitios precolombinos, de los cuales unos 400 se encuentran en la capital.

Debido al crecimiento de la ciudad, estos sitios -conocidos como ´huacas´- están empezando a quedar acorralados en medio de la arquitectura moderna.

Para evidenciar este proceso de” asfixiamiento”, el fotógrafo Rodrigo Abd de la agencia AP filmó y fotografió la capital peruana con un dron. Así se observa cómo los sitios arqueológicos precolombinos colindan con edificios de muchos pisos, un estadio de fútbol o se ven atravesados por una carretera.

El sitio arqueológico precolombino La Luz, bordeado por un estadio de fútbol en Lima.

El sitio arqueológico precolombino Pucllana, dividido por la calle Independencia en el distrito Miraflores de Lima.

Una pirámide bien conservada frente a la mansión del presidente Pedro Pablo Kuczynski "pone de relieve el avance progresivo de la urbanización en la bulliciosa capital de Perú", publica AP. La agencia subraya, refiriéndose a datos oficiales, que el país logra proteger con efectividad tan solo el 1 % de esos sitios históricos, "dejando cientos de ruinas abandonadas o relegadas a convertirse en vertederos públicos".

El arqueólogo local Héctor Walde comentó la situación explicando que "desde la fundación de Lima no hubo ninguna relación de la gente con las ´huacas´, más allá de verlas como montículos o para buscar tesoros". “Huaca” en quechua significa “oráculo” o lugar sagrado”.

Acerca de esta dislocación, un pequeño grupo de arqueólogos trabaja para revertir el proceso y preservar estos sitios que se encuentran ´apretados´ por la expansión urbana. "La idea es que los peruanos sientan que el patrimonio es algo que se disfruta ", señaló a AP Jorge Arrunátegui, viceministro peruano de Patrimonio Cultural.

En ese sentido, el arqueólogo Krzysztof Makowski, de la Universidad de Varsovia, y que excava desde hace 30 años en Perú, sostiene que un mayor presupuesto no es lo único que se requiere para afrontar el problema. "No solo hay que construir museos, también hay que formar a la gente que trabajará allí. El museo tiene que investigar, lo mismo las universidades. Cuando existe ese tipo de personas es más fácil proteger el patrimonio", concluye el especialista.

Mientras tanto, construcciones originadas antes de la llegada de los españoles, conviven con los nuevos proyectos inmobiliarios y carreteras, luchando por espacio en la Lima del siglo XXI.

Una torre de departamentos y una carretera rodean un cementerio de adobe construido hace más de 900 años atrás.