El expresidente Pedro Castillo permanecerá detenido hasta el 13 de diciembre próximo, luego que el Poder Judicial admitiera la solicitud del Ministerio Público.
El juez supremo de Investigación Preparatoria Juan Carlos Checkley, admitió el pedido fiscal y dispuso siete días de detención preliminar judicial contra el exmandatario por el delito en flagrancia de rebelión, al anunciar un golpe de Estado el martes 7 de diciembre.
La resolución publicada horas después de la audiencia virtual en la que participó Pedro Castillo de manera virtual desde la sede de la Dinoes también determinó que fue legal la intervención policial contra el expresidente que ocurrió a las 13:42 del miércoles 7 de diciembre.
Esta detención ocurrió cuando Pedro Castillo estaba acompañado por Aníbal Torres y se estaba desplazando a bordo de un vehículo oficial acompañado por personal de su escolta por el Cercado de Lima.
La decisión del Poder Judicial establece que la detención judicial por flagrancia estará vigente contando desde su intervención el 7 y hasta el 13 de diciembre.
Pedro Castillo permanece desde el miércoles en la sede de la Dinoes, donde también cumple su condena el expresidente Alberto Fujimori.
Ahí, fue objeto de una diligencia para recoger su testimonio encabezada por la fiscal de la Nación, Patricia Benavides.
Pedro Castillo defendido por Aníbal Torres
En la audiencia donde Pedro Castillo participó de manera virtual, fue defendido por Aníbal Torres y el abogado Víctor Pérez Liendo. Ambos tomaron la palabra para cuestionar la acusación de la fiscalía y señalar que no se había concretado ningún acto para que el expresidente sea procesado por rebelión o conspiración.
“Se está violando flagrantemente el principio de legalidad. No hay un crimen ni el hecho flagrante. El señor representante del Ministerio Público ha dicho multiplicidad de cosas y no ha acreditado los dos delitos que supuestamente habría cometido Pedro Castillo”, dijo Aníbal Torres cuando tomó la palabra.
Castillo Terrones, en la audiencia, se limitó a darle la palabra a sus abogados y no agregó nada a sus testimonios cuando fue consultado por el juez Checkley.