En un 30% se reduciría el tiempo de espera de los conductores en los semáforos de Lima con la sincronización y monitoreo de estos a través de la central que maneja Protránsito, a lo cual se denomina “olas verdes”, por lo cual se está trabajando en la centralización de los semáforos ubicados en las principales intersecciones de la capital, señaló el jefe de ese organismo, Fernando Perera.
Explicó que el tiempo que actualmente se espera en un semáforo depende del volumen del tráfico y que lo máximo en una “ola verde” debería ser 300 segundos (cinco minutos).
En el caso de la avenida Javier Prado -como en otras grandes vías- precisó que el pase de unidades no debería ser tan largo como lo hace el policía de tránsito, que rompe los ciclos semafóricos.
Perera admitió que la amplicación de Pico y Placa ha generado la sobrecarga vehicular en ciertas vías laterales, por lo que –dijo- se ha hecho el conteo para aplicar los ajustes necesarios.
No obstante, el especialista sostuvo que debe tenerse en cuenta que anualmente ingresan a Lima 200,000 vehículos nuevos y mantener las condiciones de circulación de esas unidades implicaría la construcción del equivalente a una avenida Arequipa cada año”.
Agregó que esa situación debe cambiar y por eso la municipalidad metropolitana trabaja en el fortalecimiento del transporte masivo con los corredores viales. “Tenemos que ir más al uso del transporte colectivo y no al individual”, sostuvo.