El gobierno peruano intentará reflotar el buque chileno “Covadonga” hundido hace 141 años durante la guerra del Pacífico que enfrentó a Perú y Bolivia contra Chile en 1879-1884, anunció el ministro de Cultura, Ciro Gálvez.
“Vamos a hacer las gestiones para rescatar los restos de este barco de guerra para tener un recuerdo de ese infausto acontecimiento y que en el futuro no vuelvan a ocurrir conflictos entre países hermanos”, dijo Gálvez.
Gálvez visitó el domingo el puerto de Chancay, 100 km al norte de Lima, donde la nave chilena fue hundida el 13 de setiembre de 1880 por peruanos que dejaron un bote cargado de explosivos que al ser izado por la tripulación chilena estalló provocando su hundimiento. La trampa explosiva mató a 31 marineros chilenos y al comandante del buque.
“Aquí fue hundido el barco chileno [...], es un patrimonio marítimo y cultural que está en territorio peruano”, añadió el ministro.
La nave “Virgen de Covadonga” era una goleta que España perdió a manos chilenas durante la guerra contra la alianza sudamericana conformada por Ecuador, Perú, Chile y Bolivia, en 1865-1866. Luego combatió con la bandera chilena en la guerra del Pacífico.
El anuncio es parte de una serie de iniciativas para revalorar el patrimonio cultural de la zona de Chancay, indicó el ministro del nuevo presidente izquierdista Pedro Castillo.
La misma propuesta había sido hecha en el 2010 por el entonces líder opositor Ollanta Humala, quien pedía canjear la “Covadonga” por el monitor “Huáscar”, capturado por Chile en la guerra del Pacífico y mantenido como museo flotante en ese país. El pedido fue descartado por las autoridades peruanas.
El “Huáscar” es un pequeño buque de guerra que estuvo al mando del almirante Miguel Grau, máximo héroe nacional de Perú y permanece en el puerto de Talcahuano, 500 km al sur de Santiago.
La guerra de 1879 todavía causa roces entre Perú, Bolivia y Chile.
El tema “Huáscar” saltó al primer plano este año durante la campaña electoral peruana cuando el candidato presidencial Yonhy Lescano prometió que si ganaba los comicios pediría a Chile devolver el histórico monitor.
La Asociación Nacional Promarina del Perú, formada por descendientes de combatientes de la guerra, rechazó la iniciativa. En cambio, consideran que el navío debe ser hundido en el lugar donde perdió su última batalla en octubre de 1879, en Punta Angamos, en el norte de Chile.
La propuesta de Lescano fue rechazada por el alcalde de Talcahuano.