A sus 36 años, la fondista peruana Gladys Tejeda volverá a participar en unos Juegos Bolivarianos con el objetivo de acrecentar su figura histórica con una nueva medalla de oro que le permita iniciar por todo lo alto el ciclo de competencias con miras a los Juegos Olímpicos de París 2024.
Tejeda, nacida en la región andina de Junín, buscará aumentar su palmarés en los XIX Bolivarianos de Valledupar tras haber ganado las medallas de oro del medio maratón femenino en las dos ediciones anteriores de esa competencia, celebradas en el 2017 en la ciudad colombiana de Santa Marta, y en la peruana Trujillo en el 2013.
En Santa Marta, la atleta venció en la carrera de 21,097 kilómetros con un tiempo de 1 hora, 14 minutos y 55 segundos, lo que le permitió revalidar el oro que se colgó cuatro años antes en Trujillo con un récord bolivariano de 1 hora, 12 minutos y 53 segundos.
A pesar de su trayectoria, y de que venía de ser la mejor latinoamericana en el maratón de los Juegos Olímpicos de Río 2016, Tejeda tuvo que afrontar el sinsabor de su exclusión inicial de los Bolivarianos del 2017 por, supuestamente, no haber competido ese año en ningún control oficial y tampoco tener alguna marca nueva.
En medio de la sorpresa generalizada por esta decisión, la atleta denunció que había sido discriminada y recordó que ese año había ganado, por segunda vez en su carrera, el maratón de México.
La polémica medida llevó al gobierno a intervenir para alcanzar un acuerdo con la Federación Deportiva de Atletismo de Perú (FDPA) que permitió su inclusión en la nómina de deportistas, un apoyo que compensó con una nueva medalla dorada para su país.
Dos años antes, Tejeda también había ganado el oro de los Juegos Panamericanos de Toronto, pero la organización le retiró esa presea y la suspendió durante seis meses por haber dado positivo en una prueba antidopaje.
Después de una gran polémica, ya que la deportista siempre afirmó que había consumido un diurético por prescripción médica, volvió a las competencias y obtuvo su revancha en los Panamericanos de Lima 2019, en los que volvió a ganar el oro con un récord de 2 horas, 30 minutos y 55 segundos.
Nombrada “hija predilecta” de Junín en el 2012, fue reconocida por la FDPA como la mejor atleta peruana del 2021 y en febrero de este año estableció un récord sudamericano en el maratón de Sevilla, con un tiempo de 2 horas, 25 minutos y 57 segundos.
Tras alcanzar esa marca, aseguró que sigue “entrenando muy fuerte” para mantener su mejor forma atlética y que el gran apoyo que recibe de sus compatriotas es su “motivación para seguir dando todo lo mejor en cada competencia”.
Además de buscar el tercer oro consecutivo en los XIX Juegos Bolivarianos de Valledupar, la atleta tiene entre sus objetivos revalidar el oro en los Panamericanos de Santiago 2023 y alcanzar la clasificación para los Juegos Olímpicos de París 2024.
Será, de esa manera, el rostro más reconocido de una de las delegaciones más numerosas de Perú en unos Bolivarianos, conformada por unas 600 personas, más de 450 de las cuales serán atletas que participarán en 41 de las 45 disciplinas deportivas.
En Valledupar, Perú buscará mejorar el medallero que obtuvo en Santa Marta 2017, cuando alcanzó 154 medallas, 32 de ellas de oro, 53 de plata y 69 de bronce.