La ministra de Salud, Pilar Mazzetti, reiteró este miércoles que las cifras de contagios por el nuevo coronavirus reportan un incremento lento, y por ello a la fecha no se puede considerar que existe un rebrote de la pandemia en el país.
En declaraciones a la prensa, la titular del Minsa reafirmó que su sector está vigilante respecto a la información oficial del avance de este virus en el territorio nacional, luego que desde hace 29 días se decretara una cuarentena focalizada.
“Estamos haciendo todo un esfuerzo por tener las cifras lo más exacta posible. Si ustedes siguen las cifras van a ver efectivamente como ha venido pasando en otros lugares, que una vez que se relajan algunas medidas están viendo un incremento de cifras, pero [aquí] no es como en otros lugares del mundo, hasta ahora, en donde hemos visto que verdaderamente habido un rebrote”, refirió.
“El aumento de cifras es lento, y afortunadamente hasta el momento por lo menos no tenemos lo que se caracteriza como un rebrote”, remarcó Mazzetti. Asimismo, detalló que en la (plataforma) Sala Situacional ahora presenta mayor información.
Respecto al sinceramiento de la cifra de fallecidos, la ministra de Salud señaló que se estima que unas 43,000 personas han fallecido durante la pandemia del nuevo coronavirus.
No obstante, precisó que se tendrían que evaluar los casos sospechosos para determinar si la muerte fue a causa del COVID-19. Hasta ayer, martes, el Ministerio de Salud (Minsa) reportó que el número de muertos era de 18.612.
“Las personas fallecidas por coronavirus, las que tenemos caracterizadas por una prueba específica, son 18,000. Son 8,000 las personas sospechosas con criterio médico y tenemos en el Sinadef una diferencia que puede llegar a 19,000 personas más. Esa diferencia la podemos aclarar cuando se pueda realmente evaluar cada caso. Creo que tenemos que considerar todos que es una cifra de alrededor de 43,000 personas”, dijo.
“Revisen las salas situacionales de Inglaterra, España, Estados Unidos y países latinos, que tienen cifras con pruebas, cifras sospechosas por criterios médicos y la diferencia que está en los sistemas de certificación de defunciones. Pensamos que son 43,000 personas que han tenido que perder la vida en este momento, la gran mayoría por COVID-19, algunas probablemente no sean por COVID-19”, insistió.