Por Germán Vega
Docente de la Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad de Piura
Existe un gran descontento hacia los dos sistemas de pensiones peruanos: ONP y AFP. Hay dos motivos que explican estas críticas: la necesidad de disponer de los aportes hoy debido a la crisis económica y el descontento por las reglas de los sistemas. Recientemente el Congreso aprobó una ley que permite la devolución de aportes a la ONP. ¿Consigue solucionar estos problemas? Hagamos un análisis económico, dejando de lado el tema de la constitucionalidad de lo aprobado.
Empecemos con una aclaración, en la ONP no existen cuentas individuales como en la AFP. Los aportes de los trabajadores afiliados hoy permiten pagar las actuales pensiones. A cambio, si ellos cumplen los requisitos, recibirán una pensión pagada por los trabajadores del futuro.
Vamos a la ley. Se determina la entrega de 1 UIT a los aportantes. Ello solucionaría el problema de la necesidad corriente de los fondos. Pero ignora un dato importante: del 60% de hogares con menores ingresos, menos del 10% está afiliado a la ONP. Es decir, no se focaliza la ayuda hacia la población más vulnerable. Y es importante focalizar porque el Gobierno no tiene recursos infinitos. Ya en años anteriores, parte de las pensiones tuvieron que ser cubiertas por el Tesoro Público. Esta nueva ley generaría un gasto adicional de S/ 15,000 millones cuando los ingresos fiscales se reducirían en 31,000 millones.
Ante este costo excesivo, ¿se consigue al menos mejorar las reglas de la ONP? Por ejemplo, los trabajadores que no llegan a 20 años de aportes no reciben pensión alguna. O muchos afiliados reclaman que algunos de sus aportes no son reconocidos. Sucede que ninguno de estos temas es abordado por la ley. Entonces, es una ley que genera un gasto excesivo al Tesoro Público en un contexto de menores ingresos y de una mayor necesidad de ayudar a las personas más vulnerables. La ley no focaliza la ayuda ni mejora el sistema.
Dos cuestiones se derivan de este tema. Si el gasto es excesivo, ¿por qué se destinaron montos mayores al programa Reactiva Perú? Sucede que los fondos de este programa provienen directamente del BCRP, por lo tanto son independientes del Tesoro Público. Solo si las empresas no pagan los préstamos de este programa se hacen efectivas las garantías sustentadas con fondos públicos.
Por otro lado, ¿hay alguna solución? La propuesta del Ejecutivo va en ese sentido. Bono a los aportantes que perdieron su trabajo, reducción del requisito de años para recibir pensión, flexibilización en el registro de los aportes, entre otras mejoras. Pero ello no debe ser suficiente. Es obligación del Gobierno asegurar una pensión justa para la mayoría de su población. Eso no sucede hoy en ninguno de los dos sistemas. Hay una comisión en el Congreso para reformar el sistema de pensiones. Pero la reciente ley aprobada no es un buen indicio.