Jiro Yamada, gerente general y presidente del directorio del Grupo Mitsui
Desde 1974, en el mes de junio se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente, y cuenta con la participación de diferentes entidades, tanto públicas como privadas, así como la cooperación de ciudadanos que saben que aportando su granito de arena ya son parte del cambio. Sin embargo, y a pesar de los esfuerzos de la población, la contaminación ambiental crece de manera vertiginosa. Las consecuencias de esta problemática recaen principalmente en los niños, ya que son las personas más vulnerables y que pueden contraer con más facilidad las enfermedades que se propagan por el cambio climático; incluso, cerca del 90% de la carga de morbilidad desencadenantes por esta variación alarmante del clima reincide sobre los menores a cinco años, según la UNICEF.
Basándonos en esa realidad, es importante que las empresas tengamos en cuenta el futuro que vamos a dejar a las siguientes generaciones. Con este objetivo en mente, desde el Grupo Mitsui hemos basado nuestras diversas gamas de negocios en los siguientes 5 pilares: asegurar el suministro sostenible de productos esenciales, mejorar la calidad de vida de las personas, aportar en la generación de una sociedad eco-friendly, desarrollar talento que conduzca a la creación de valor, y construir una organización con integridad.
Pensando en otras maneras de lograr un cambio, creamos un nuevo concepto de responsabilidad medioambiental y social para un Perú sostenible, partiendo desde nuestros colaboradores, lo que, a la vez fomentará la integración de los mismos. La iniciativa “Project 4000″ – nombrada así por la cantidad de colaboradores que conforman el grupo en Perú-, que a través de un rubro de sus actividades que están dirigidas a la ayuda social, busca promover el cuidado del medio ambiente y contribuir con el desarrollo positivo del mismo, así como el de las comunidades aledañas a nuestra zona de impacto. A diferencia de acciones que se pueden desarrollar a partir de donaciones a otras organizaciones, el implicar a los colaboradores de todas las 13 empresas, genera mayor impacto ambiental, ya que estos podrán tener influencia en las acciones en sus hogares y círculo cercano.
Hoy en día, sabemos que ya no hay retroceso en el impacto ambiental que ha tenido la contaminación, el descuido de nuestras acciones diarias, y la inadecuada gestión de residuos sólidos durante todo este tiempo. Pero lo que podemos hacer es, además de tener un proceso sostenible en las empresas, ir más allá, organizar actividades con los colaboradores para fomentar la preservación del medio ambiente. En este mes de concientización del cuidado del único hogar con el que contamos: el planeta tierra, hago un llamado de acción para que todos nos juntemos para hacer un cambio de hábitos más conscientes, ya sea recoger una botella de plástico del suelo cuando lo veamos, o participar en un voluntariado una vez al mes. Cada acción suma y juntos podemos hacer un gran cambio.