El presidente ruso, Vladímir Putin, decretó hoy la ley marcial en las cuatro regiones ucranianas anexionadas, Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia, según anunció al comienzo de la reunión del Consejo de Seguridad de Rusia.
“Las leyes constitucionales sobre la entrada de los cuatro territorios en el seno de la Federación Rusa ya han entrado en vigor. El régimen de Kiev, como es bien sabido, se niega a reconocer la voluntad y la elección de la gente”, dijo Putin en una intervención televisada.
Según el decreto, la ley marcial entrará en vigor este jueves en las cuatro regiones anexionadas el pasado 30 de septiembre.
Putin, cuyo decreto será aprobado hoy mismo por el Senado ruso, acusó a Kiev de rechazar “cualquier propuesta de negociación”
“Siguen los disparos. Muere gente inocente”, señaló.
Acusó a las autoridades ucranianas, a las que calificó de “cómplices de Hitler”, de recurrir a “métodos terroristas” para aterrorizar a la población de los territorios ocupados por Moscú en el este y sur de Ucrania.
Para reforzar la seguridad de los territorios anexionados, Putin decretó también la creación de unidades de defensa territorial.
También denunció que Kiev ha enviado grupos subversivos al territorio de la Federación Rusa para atentar contra la infraestructura civil, como el puente de Crimea, y también la nuclear.
Al respecto, Putin concedió nuevas facultades a los jefes de las regiones con el fin de que adopten medidas de seguridad en relación con la población y con las infraestructuras críticas.
En un segundo decreto introdujo “el nivel medio de reacción” en las regiones rusas fronterizas con Ucrania -Krasnodar, Bélgorod, Briansk, Vorónezh, Kursk y Rostov-, además de la anexionada península de Crimea.
Por tanto, los jefes de dichas regiones podrán evacuar a la población residente en ciertas zonas, introducir un régimen especial de entrada y salida de sus territorios y restringir la libertad de movimiento de la población en ellas.
En cuanto a los distritos federales Centro y Sur se introduce un “nivel de alerta elevado” y en el resto de la Federación Rusa un “nivel básico de alerta”.