Las ventas de vehículos llamados “limpios” (eléctricos, híbridos o impulsados por hidrógeno) prácticamente se triplicaron el año pasado en China, impulsadas por las subvenciones en el primer mercado automovilístico mundial, anunció el martes una federación profesional.
China, principal contaminador mundial, quiere tener en el 2035 un parque automóvil mayoritariamente compuesto de vehículos no contaminantes.
En el 2021, se vendieron casi tres millones de vehículos limpios, indicó la Federación China de Constructores de Coches Individuales (CPCA).
Se trata de un aumento del 169% anual, casi el triple respecto al 2020.
En este contexto, la CPCA revisó sus previsiones al alza para el 2022 y augura la venta de 5.5 millones de vehículos limpios.
Actualmente, una cuarta parte del parque automóvil del gigante asiático funciona con nuevas energías.
Numerosas marcas locales (BYD, SAIC-GM-Wuling, Geely, XPeng, Nio...) compiten en este sector con el estadounidense Tesla.
El mercado se ha visto impulsado por las subvenciones sobre la compra de este tipo de vehículos, que se redujeron un 30% desde el 1 de enero y supuestamente deben desaparecer por completo a finales de este año.
En global, las ventas de automóviles crecieron un 4.4% interanual en China, alcanzando 20.1 millones de vehículos, después de tres años de retroceso.
En crecimiento continuo desde los años 1990 por la mejora de la vida de la población, el mercado se frenó primero por la ralentización económica y las tensiones comerciales con Estados Unidos y después por la pandemia del coronavirus.