Unas 270 millones de personas en el mundo -el equivalente a las poblaciones combinadas de Alemania, Reino Unido, Francia e Italia- están borde de la hambruna, dijo el jueves el jefe del Programa Mundial de Alimentos de la ONU, al recibir el Premio Nobel de la Paz en representación del organismo.
El WFP (por su sigla en inglés), que ha coordinado la logística médica durante la pandemia del coronavirus, fue anunciado como ganador del premio del 2020 en octubre.
“Debido a tantas guerras, al cambio climático, al uso extendido del hambre como arma política y militar, y a la pandemia global que hace todo exponencialmente más difícil, unas 270 millones de personas están marchando hacia la hambruna”, dijo David Beasley desde la sede del WFP en Roma, al recibir la medalla y el diploma del Nobel.
“La incapacidad de abordar estas necesidades causará una pandemia de hambre que será enorme en comparación al impacto del COVID. Y como si eso no fuese suficientemente malo, de estas 270 millones de personas, 30 millones dependen en un 100% de nosotros para sobrevivir”, añadió.
En lugar de la ceremonia habitual en el Ayuntamiento de Oslo ante dignatarios, incluido el rey Harald de Noruega, los funcionarios del WFP se quedaron en Roma debido a la pandemia de coronavirus.
Se espera que viajen a Oslo en una etapa posterior para dar la tradicional conferencia del Nobel.
Los premios Nobel restantes, de medicina, física, química, literatura y economía, que tradicionalmente se entregan en Estocolmo, también se han reconvertido en eventos por internet.
Las ceremonias se llevan a cabo todos los años el 10 de diciembre, aniversario de la muerte del industrial sueco Alfred Nobel, quien dejó su patrimonio para financiar los premios en su testamento de 1895.